San Salvador, 25 ene (Prensa Latina) La búsqueda de los desaparecidos en El Salvador es un asunto que desafía hoy a las autoridades apremiadas por solicitudes de nuevas investigaciones de familiares de las víctimas.
Cifras conservadoras indican que durante la guerra entre 1979 y 1992 al menos cinco mil personas fueron dadas como desaparecidas, incluso muchos niños y niñas que no fueron asesinados por el ejército y si entregadas a familiares o amigos que las registraban como propias.
Ahora el tema vuelve a ocupar la atención cuando un grupos de familias demandan a la Fiscalía General de la República (FGR) para que las ayude a buscar a seres queridos que no se perdieron en el pasado siglo y si en este, y de los que no saben su paradero.
Por medio de un álbum de fotografías con 43 casos, los familiares que integran el Bloque de Búsqueda de Personas Desaparecidas en El Salvador pidieron este martes a la FGR que se agilicen los procesos de investigación en los casos denunciados.
Los demandantes quieren saber el paradero de sus seres queridos y “quién o quiénes son los responsables de esos hechos y cuyas familias han quedado sin recibir atención adecuada por las autoridades…se pretenden reiterar el llamado sobre la necesidad que el Estado tome medidas concretas ante la problemática», afirmó el Bloque de familiares en un comunicado.
Asimismo piden a la Fiscalía que informe y atienda en condiciones de dignidad y respeto a las familias de los desaparecidos sobre los procesos de investigación y búsqueda, que diseñe también un mapa de posibles cementerios y fosas clandestinas existentes en el país.
El Estado salvadoreño está en la obligación de dar respuestas ágiles y eficaces que permitan su inmediata búsqueda y localización, para salvaguardar sus vidas de las diversas vulneraciones a sus derechos, dijo Ruth Montalván, madre de una persona desaparecida.
Estos reclamos se ahora no corresponden al siglo pasado, ya que los 43 casos que contempla la demanda, el más antiguo es del 27 de agosto del 2007 y el más reciente del 13 de septiembre del 2022, la mayoría registrados en los departamentos de San Salvador, La Libertad, Sonsonate y Santa Ana.
Uno de esos casos es el de José Elizar Elizondo, un niño de 14 años de edad que desapareció hace más de 10 años, específicamente un 4 de junio del 2011, y que desde entonces su madre, Miriam Elizondo, lo busca.
«Por más de 11 años no he parado de buscarlo, ni un día dejé de buscarlo», dijo Elizondo a medios de prensa con el dolor reflejado en su rostro y con la esperanza de conocer su paradero.
La Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), una de las organizaciones que da acompañamiento a los familiares, asegura que las familias no obtienen respuesta de la institucionalidad, y esperan que con la presentación del álbum cumplan con sus obligaciones.
Sin embargo, pocos esperan que haya una respuesta en este caso más cuando aun los miles de desaparecidos durante la guerra se mantienen a la sombra.