Puerto Príncipe, 5 feb (Prensa Latina) Cerca de 50 pasajeros fueron secuestrados en el departamento Artibonite de Haití, presuntamente por la pandilla Kokorat san ras, confirmó hoy el presidente de la Asociación de Propietarios y Conductores de Haití, Mehu Changeux.
El incidente tuvo lugar el sábado en Liancourt, al noroeste de esta capital, la misma zona donde a finales de enero fueron asesinados seis policías a manos de bandas, lo cual provocó violentas protestas del gremio.
Según el sindicalista, los miembros de grupos armados secuestraron dos autobuses, uno de ellos de la compañía Patrick Coach Line, que viajaba de Port de Paix (noreste) a Puerto Príncipe, y otro desde esta capital a Saint Marc (noroeste).
“Fueron secuestrados en la carretera de Liancourt cuando evitaban la carretera de Canaan, que se ha vuelto muy frágil a causa de una banda que controla esta zona”, dijo Changeux a medios de prensa.
Con ellos suman casi un centenar las personas secuestradas en Haití en lo que va de año, luego del rapto el viernes del periodista de Radio Visión 2000, mientras que el jueves fue retenida contra su voluntad la directora de la residencia de ancianos Les Pavillons de l’Age d’Or, Young Virgin, y el 24 de enero el exministro de Educación Pierre Buteau.
El 18 de enero, al menos 30 pasajeros provenientes de República Dominicana fueron incautados en Croix des Bouquets, al noreste de Puerto Príncipe, donde opera la poderosa pandilla 400 Mawozo.
La Policía, por su parte, admitió que se ve superada por la espiral de violencia que sacude al país caribeño y que también afecta a sus agentes.
Solo en el mes de enero 11 oficiales fueron asesinados, dos se encuentran desaparecidos y varios sufrieron heridas, la mayoría por el accionar de las pandillas, reconoció el director de la institución Frantz Elbé.
Para ayudar a las fuerzas de seguridad a contrarrestar este fenómeno, Canadá y otros países sancionaron a miembros de la élite política y económica que supuestamente financian a los grupos armados, y este fin de semana un avión de Ottawa sobrevoló los cielos de la capital para ayudar a identificar las bandas.
