San José, 8 jun (Prensa Latina/EP).- Trabajadores de la Caja Costarricense de Seguridad Social (CCSS), salieron hoy a las calles en defensa de la autonomía de esta institución pública y la no privatización de los servicios.
Encargada de la seguridad social de Costa Rica, la Caja, como también se conoce la entidad, administra dos grandes seguros: salud y pensiones, así como coordina y ejecuta programas tanto de prevención y asistencia a gran parte de la población de esta nación centroamericana.
Trabajadores de hospitales capitalinos como el México, el Calderón Guardia o el Max Peralta de la provincia de Cartago, se sumaron a las concentraciones desde horas de la mañana.
El paro laboral, convocado por Unión Nacional de Empleados de la Caja y la Seguridad Social (Undeca), es en reclamo además a una mesa de diálogo con la Junta directiva, para intercambiar sobre la Ley de empleo público.
El secretario general de (Undeca), Luis Chavarría, llamó a la apertura de los diálogos con la Presidencia Ejecutiva para evitar que haya un mayor impacto en los servicios que se ofrecen a los asegurados de la institución.
Sin embargo, denuncia que ese intercambio no ha existido previamente y criticó el poco interés de los directivos de conversar sobre temas de importancia, la razón por la que en esta jornada tuvieron que salir a las calles en protesta y paro de labores.
Las manifestaciones provocan entonces afectaciones en los servicios no esenciales que se presentan en los diferentes establecimientos de salud.
Aunque estaba concebido organizar la logística para no afectar servicios más urgentes, aquellos como las citas previas tuvieron un impacto importante.
Sobre este aspecto, Chavarría dijo a la prensa que cuando el servicio es esencial, no se puede quedar cerrado, tienen que quedar algunos funcionarios, si es Farmacia, por ejemplo, entregando medicamentos, será lo básico, destacó.
Explicó que está en la mayor disposición de que los trabajadores vuelvan a sus puestos, siempre y cuando haya una apertura al diálogo por parte de las autoridades.
Mientras, la presidenta ejecutiva de la CCSS, Marta Eugenia Esquivel, calificó la huelga de trabajadores de este jueves como vergonzosa.
En su primera reacción al movimiento, lejos de acceder al diálogo acusó a los empleados en el Juzgado de Trabajo y pidió que la huelga se declare ilegal.
