Belgrado, 30 may (Sputnik).- El ministro de Defensa de Serbia, Bratislav Gasic, y las autoridades de la ciudad de Varvarin rindieron homenaje a las víctimas civiles de los bombardeos de la OTAN en la festividad cristiana de la Santa Trinidad en mayo de 1999, según comunicó el Ministerio de Defensa.
«¿Por qué bombardearon a plena luz del día el puente en el que cientos de civiles inocentes celebraban la fiesta de la Santa Trinidad? Muchos enmudecerían ante el terror de hacer esa pregunta. Enmudecería también Sanja Milenkovic, escolar del Liceo de Matemáticas y una de las mejores estudiantes en la historia de la escuela básica de la ciudad de Varvarin que en ese entonces tenía 15 años. A Sanja, por desgracia, no le dejaron hacer esa pregunta. Su vida y la de otros nueve connacionales se truncaron en este lugar el 30 de mayo de 1999», dijo el titular de Defensa al depositar una ofrenda floral.
El 30 de mayo de 1999, los aviones de guerra de la OTAN lanzaron dos ataques aéreos contra el puente de la ciudad de Varvarin, situada en el sur de Serbia, cuando en el lugar se encontraban congregadas cerca de un millar de fieles cristianos ortodoxos.
Durante el primer ataque el puente quedó completamente destruido, pero minutos después los aviones de la OTAN volvieron a lanzar otro ataque segando la vida de 10 personas, decenas resultaron heridos.
Gasic leyó los nombres de cada una de las víctimas mortales en esos bombardeos de la OTAN, el bloque bélico que encabeza Estados Unidos.
«Muchos civiles murieron en distintos lugares de Serbia en los 78 días que duró la agresión de la OTAN. El agresor sin remordimientos los declaró bajas colaterales (…) Nunca olvidaremos a los muertos inocentes, que perdieron sus vidas a causa de las bombas de la OTAN», señaló Gasic.
La OTAN comenzó a bombardear Yugoslavia el 24 de marzo de 1999 con el pretexto de supuestas limpiezas étnicas en Kosovo.
Los ataques de la OTAN, sin la autorización de la ONU, dejaron en la antigua Yugoslavia más de 2.500 muertos, entre ellos 87 niños, y causaron daños en las infraestructuras estimados en 100.000 millones de dólares. (Sputnik)