Beijing, 14 jun (Xinhua) — El plan de la Comisión Europea para imponer aranceles adicionales a los vehículos eléctricos (VE) chinos es un ejemplo de proteccionismo miope, que está destinado a obstaculizar el crecimiento de las energías limpias de la región y va en contra de sus objetivos climáticos.
La decisión de aplicar fuertes restricciones a los productos de energías limpias se produjo a pesar del noble compromiso de la Unión Europea (UE) de reducir las emisiones en al menos un 55 por ciento para el año 2030, en comparación con los niveles de 1990, y la transición a un estándar de cero emisiones para todos los autos y furgonetas de nueva matriculación para 2035.
A diferencia de los Estados Unidos, que es exportador de petróleo, la UE se enfrenta a una precaria dependencia del suministro de combustibles fósiles y necesita urgentemente una revisión de su sector energético.
Un análisis de 2022, realizado por la Universidad de Leiden, subrayó la urgencia de que la UE acelere la eliminación gradual de los vehículos con motor de combustión interna y pase a la movilidad eléctrica a un ritmo más rápido para cumplir su meta de emisiones de carbono para 2030.
El bloque también está trabajando en una nueva legislación para lograr un objetivo de neutralidad climática en 2050, con el fin de alcanzar así su compromiso de mitigación del cambio climático bajo el marco del Acuerdo de París.
Sin embargo, el resultado directo de los aranceles punitivos es que los consumidores europeos están destinados a encontrarse con una menor disponibilidad de vehículos asequibles de energías limpias, producidos por fabricantes tanto chinos como europeos.
En la actualidad, la mayoría de los principales fabricantes de automóviles europeos se han integrado a la cadena de la industria de VE de China, obteniendo acceso a una amplia gama de componentes automotrices económicos, baterías de alta calidad y sistemas inteligentes de última generación.
Dentro de este ecosistema, Volkswagen ha seguido aumentando la inversión en su fábrica de Hefei para impulsar las capacidades de investigación y desarrollo, mientras que BMW está exportando al mercado europeo el modelo todoterreno totalmente eléctrico iX3, fabricado en la ciudad nororiental china de Shenyang.
China está fomentando un ecosistema de energías limpias innovador y dinámico, que beneficia no solo a los fabricantes de vehículos eléctricos del país, sino también a sus homólogos de Europa. Las recompensas son recíprocas.
Los incentivos industriales, una práctica internacional ampliamente aceptada, son permitidos por la Organización Mundial del Comercio, con la condición de que sigan los principios de no discriminación.
«Así es la economía de mercado. Dejar que la competencia se desarrolle», afirmó Ola Kallenius, presidente del Consejo de Administración del Grupo Mercedes-Benz. Los comentarios de Kallenius coinciden con la postura colectiva de los fabricantes de automóviles europeos: el proteccionismo es una estrategia miope que corre el riesgo de sofocar la vitalidad del mercado de las tecnologías limpias.
Los éxitos corporativos de estos reconocidos gigantes de automóvil han demostrado que la competencia sirve como un poderoso catalizador para una continua innovación tecnológica.
La competencia también puede impulsar la eficiencia operativa, reducir los gastos y potenciar la inversión permanente en infraestructuras, creando así nuevos empleos y alimentando un mayor potencial de crecimiento.
Un mercado aletargado por políticas restrictivas, a su vez, frenará la afluencia de capital, la innovación y el empleo que, de otro modo, podría generar un sector floreciente.
Evidentemente, el endurecimiento de los aranceles, en lugar de crear unas condiciones equitativas, está contribuyendo a eliminar ese entorno competitivo mutuamente beneficioso, lo que efectivamente frena el progreso del bloque hacia un futuro más ecológico.
Las lecciones de la historia no están distantes. La decisión del bloque de imponer medidas antisubvenciones contra los paneles solares, obleas y células de China en 2013 resultó ineficaz y se ha eliminado gradualmente desde 2018.
La práctica de aislamiento del mercado llevó a una disminución en las instalaciones de células solares del continente. El volumen de negocios de la industria solar fotovoltaica en los miembros de la UE cayó desde cerca de 21.300 millones de euros en 2013 a solo unos 11.200 millones de euros en 2017, según las estadísticas.
El crecimiento de la energía solar en Europa ha sido «lamentable» durante esos años, debido en parte a las obligaciones, se quejó Stephan Singer, de la Red Internacional de Acción Climática. Incluso, la Comisión Europea admitió que la derogación les beneficiaba. El escenario será similar en el caso de los impuestos sobre los VE chinos.
La búsqueda de la energía sostenible se ha convertido en un poderoso motor que ha impulsado el crecimiento de las relaciones comerciales entre China y Europa en los últimos años.
Confiar en una cadena global de suministro de VE sirve mejor a los intereses de la UE. La intención de la Comisión Europea de establecer más barreras corre el riesgo de contrarrestar el progreso alcanzado hasta ahora.
Un viejo refrán chino dice: «No dejes que se te escape una sandía mientras intentas coger una semilla de sésamo». Esto advierte contra la insensatez de aferrarse a ganancias menores, descuidando beneficios sustanciales y duraderos. Algunos políticos de la UE parecen estar siguiendo un camino similar.
En su búsqueda de beneficios inmediatos, estos políticos han optado por ignorar los intereses a largo plazo de los ciudadanos del continente.
Sin embargo, están obligados a pagar por sus maniobras miopes, una vez que el pueblo europeo conozca la verdad de tales espectáculos políticos y el daño causado a sus intereses a largo plazo.
(*) Xinhua, Agencia de Noticias de la República Popular de China.
La UE sigue tejido la cuerda para ahorcarse. La lucha climática, con no los vehículos eléctricos se ha sepultado, por los usuales mediocres jerarcas, quienes teniendo al frente un elefante, ven un microbio como un dinosaurio. La insensatez de obedecer a ciegas los mandatos del Norte, los ha llevado al colapso económico industrial absoluto. Y en su grado de locura, están poniendo el cuello y la cerviz para apañar ojivas nucleares. Ya, con pasado evento electoral en la EU, se ha purgado a los figurones de Francia y Alemania, donde sus ciudadanos han caído en razón. Pero quedan, un tal Borrell y Ursula, que de seguro tiene su bunker portátil, por donde estén, a mano, importándoles un maní, el futuro de sus respectivos conciudadanos. Y saquemos cuentas, si estos bombetas medio ricos, se han dejado corromper por el vil dinero, que no harían en esta otra parte del lago, con los pobretes de nuestros países. Piensa y, reflexiona. EL dios don dinero, dueño del mundo, ¿radiactivo?…?
A ver, primero lo primero. Huezo Zuñiga: necesita un curso de redaccion, pero urgentemente. Hay que releer como 3 veces lo que escribe como para entender que significa. Entiendo que escribe con la furia ciega digna de los enajenados, pero por favor controlese. Segundo: cuando se refiere al ¨Norte¨, a que se refiere? a ordenes que vienen de Santa Claus? supongo que es a USA, pero revise un mapa por favor…casi toda europa esta mas al norte que USA. Y volvemos otra vez con lo de las armas nucleares…quien sino Putin, solamente el, anda por alli lloriqueando de que si no lo dejan hacer lo que el quiere va a usar armas nucleares?. En este punto no me queda mas que agradecer a la agencia PROPIEDAD del gobierno chino, pues me queda claro que ya no cuenta con suficientes acolitos como para que escriban articulos defendiendo a al partido comunista, y ahora los tienen que escribir ellos mismos.