Naciones Unidas, 21 ago (Xinhua) — El representante permanente de China ante la ONU, Fu Cong, pidió hoy miércoles a algunos países que levanten «inmediatamente» todas las sanciones unilaterales.
La imposición indiscriminada de sanciones unilaterales e ilegales por parte de estos países, vulnerando la Carta de la ONU y el derecho internacional, no solo «agravan las dificultades económicas y sociales de los países sancionados, sino que también siembran las semillas de nuevos conflictos e inestabilidad», declaró Fu.
El diplomático chino hizo estas declaraciones durante el debate abierto del Consejo de Seguridad de la ONU sobre «Consolidación y mantenimiento de la paz: el nuevo programa para la paz que aborda los aspectos mundiales, regionales y nacionales de la prevención de conflictos».
«La prevención eficaz de conflictos requiere unas condiciones externas favorables», dijo, destacando el papel de las Naciones Unidas en esta cuestión.
«Debemos defender la justicia internacional, mientras nos oponemos tanto a la injerencia en los asuntos internos de otros países como al unilateralismo y la hegemonía», afirmó el enviado chino.
Añadió que la imposición indiscriminada de sanciones unilaterales ilegales por parte de algunos países, vulnerando la Carta de la ONU y el derecho internacional, «no solo agrava las dificultades económicas y sociales de los países hacia los que se dirigen, sino que también siembra las semillas de nuevos conflictos e inestabilidad».
«Pedimos a estos países que levanten de inmediato todas las sanciones unilaterales», exhortó Fu.
Esas sanciones unilaterales se aplican a la mayoría de países débiles, los cuales es un vil chantaje, coacción y arrinconar gobiernos de turno que no siguen o se oponen a sus particulares intereses. Y entre naciones poderosas también se aplican esas represarías, cuando la desventaja en no poder competir de tú a tú, en precios, calidad y hasta cantidad se ven rebasados, donde los costos, materia prima, energía y mano de obra es mucho más barata. Esos factores son la razón de ser soterrados los europeos y Occidente en general, en sus producciones, empresas y mercados internos. Claro, la infecta oferta y demanda, ante la libre competencia han pasado a ser palabras muertas, como muchos otros convenios o acuerdos internacionales. Quien es dueño de bola, se cree el crack del juego, con cínica arbitrariedad. El insolente parcialismo de la ONU, seguirá evidenciándose.