San José, 26 ago (EP(PL)- Los tres costarricenses fallecidos el jueves en medio del peor brote nacional de esa enfermedad reactivan hoy el debate sobre la introducción en el país de vacunas contra la enfermedad, empleadas en seis estados de la región.
La reactualización del tema siguió a revelaciones de la vicepresidenta y ministra de Salud, Mary Munive, respecto a que el gobierno está a la espera de los resultados en Honduras de un plan piloto de inmunización contra ese padecimiento arboviral (transmitido por mosquitos).
Los decesos fueron posteriores al momento de las declaraciones de la titular el 18 de agosto, pero los contagios oscilaban entonces y se mantienen ahora en unos 15 mil, para un incremento del 329 por ciento respecto a los diagnosticados en similar etapa de 2023.
La propia titular comunicó el deceso de los primeros fallecimientos este año de dos pacientes comprobados de padecer dengue y de un tercero sospechoso de contraer la enfermedad, junto al reporte de mil nuevos casos, que ratifican el peor brote de dengue en la historia local.
Especialistas estudian aún –según la ministra- los análisis sobre los tres fallecimientos, a fin de determinar si el virus transmitido por el mosquito Aedes aegypti fue el responsable o no de esas muertes, que no ocurrían por esa causa desde 2006.
Según esas fuentes, los dos inmunizantes que se abren paso en el mundo contra esta enfermedad, entre otras naciones en la referida Honduras, uno, el TAK003, es desarrollado por la farmacéutica japonesa Takeda, y el otro, el CYD-TDV, por el grupo francés Sanofi Pasteur.
La primera, es una vacuna viva atenuada, que contiene versiones debilitadas de los cuatro serotipos del virus y se emplea en personas de 6 a 16 años y en entornos con alta carga de dengue y alta intensidad de transmisión.
El segundo inmunizador es un preparado tetravalente recombinante viva para personas de 9 a 60 años, en zonas donde el dengue es endémico, administrada mediante una serie de tres dosis con un intervalo de seis meses entre cada una de ellas.
Los pacientes comprendidos en los ensayos sobre ambos compuestos, que incluyen también a ciudadanos de Argentina, Perú, Chile, Brasil y Colombia, deben someterse a un cribado o examen para detectar otras patologías y solo recibirán los inmunizadores quienes den negativo a ellas.
La iniciativa ha recibido opiniones favorables a la introducción de las vacunas por parte de dos expertos locales consultados, el infectólogo Álvaro Avilés y el epidemiólogo Juan José Romero.
Avilés opinó que la incidencia y prevalencia del dengue exige la instauración de medidas de impacto, además de las ya conocidas, aunque estimó que deben aplicarse en las zonas de más riesgo y enfocadas en los cuatro serotipos del dengue.
