Moscú, 29 sep (Sputnik).- El primer ministro del Líbano, Najinb Mikati, estimó en un torno a un millón a los desplazados internamente a causa de los bombardeos israelíes.
«El número de los desplazados internos ronda un millón de personas, es el mayor éxodo en la historia del Líbano», dijo Mikati en una rueda de prensa celebrada este domingo.
El primer ministro avanzó que su gabinete pedirá a países donantes «asistencia en esas circunstancias difíciles» e insistió en cooperar con estructuras conocidas «para evitar la infiltración de ayuda sospechosa».
Mikati afirmó que el gobierno libanés está dispuesto a acatar la resolución 1701 (2006) del Consejo de Seguridad de la ONU, «siempre y cuando se den las condiciones pertinentes como el cese del fuego en todos los frentes, incluida la Franja de Gaza».
Según el primer ministro, el Estado libanés está «movilizando todos los recursos políticos y diplomáticos para mostrar que la prioridad es poner fin a la agresión sionista en curso contra el Líbano».
Israel y el Líbano se encuentran en una guerra no declarada desde el pasado 8 de octubre, cuando Hizbulá comenzó a lanzar misiles y drones suicidas hacia las comunidades del norte de Israel como gesto de solidaridad con el movimiento palestino Hamás, tras su incursión armada en Israel, que, a su vez, respondió a cada ataque. Decenas de miles de israelíes residentes en el norte fueron desplazados a otras zonas del país.
Las acciones de ambos bandos han ido escalando, Israel ha eliminado a decenas de altos cargos de Hizbulá, incluido su líder, Hasán Nasralá, en los últimos dos meses, y se teme que el conflicto pueda convertirse en una guerra abierta o, incluso, una regional.
Desde el 23 de septiembre Israel realiza bombardeos aéreos masivos contra el Líbano que dejaron en menos de una semana más de 1.000 muertos, miles de heridos y hasta 200.000 desplazados, según las autoridades libanesas. El Gobierno del Líbano ya pidió a la ONU que intervenga y detenga la agresión.
Hizbulá, por su parte, sigue atacando con cohetes las zonas del norte de Israel. (Sputnik)