Washington, 27 oct (Prensa Latina) El expresidente de Estados Unidos Donald Trump, regresó hoy a su natal Nueva York para un mitin en el icónico Madison Square Garden, donde en su retórica insistió sobre “el enemigo desde dentro”.
A escasos días de las elecciones, Trump trata de plantar la semilla del miedo en un país donde la violencia política enseña su oreja peluda.
El rally en el Garden da inicio a la última semana completa de campaña y aunque tuvo varios oradores de alto perfil para entusiasmar a la multitud, se dice que es muy poco probable que el exmandatario sea competitivo en el sólido bastión demócrata.
Trump aseguró al preguntar a los asistentes si estaban mejor que hace cuatro años, que él arreglará todo. “Y lo vamos a solucionar”, dando por sentado su eventual triunfo.
Lo demás fue más de lo mismo, abundaron los ataques a la inteligencia de su rival demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, y atacó a la inmigración.
Según el exgobernante, Estados Unidos es un “país ocupado” debido al aumento de la inmigración en la frontera sur y reiteró su plan de repartir aranceles a las importaciones extranjeras y a las empresas que subcontratan la producción.
El expresentador de Fox News Tucker Carlson, el multimillonario Elon Musk, el senador JD Vance (republicano de Ohio), Donald Trump Jr., Robert F. Kennedy Jr., Hulk Hogan y el presidente de la Cámara de Representantes Mike Johnson (republicano de Luisiana) estuvieron entre quienes subieron al escenario antes del candidato.
Mientras, la ex primera dama Melania Trump hizo -como ya es costumbre- una aparición inusual y solo fue para sonreir desde el escenario y presentar a su esposo.
Por cierto, el evento generó lo que buscaba: el ruido mediático, que sirvió además para amplificar los disparates de algunos de sus invitados, porque en el desfile de oradores uno se llevó los titulares.
El comediante Tony Hinchcliffe, conocido como Kill Tony, se refirió a Puerto Rico como «una isla flotante de basura en medio del océano», lo que provocó todo menos risa.
El sitio escogido por Trump, inevitablemente, hace recordar la historia.
Fue en el popular estadio donde la actriz y cantante Marilyn Monroe interpretó el «Happy Birthday, Mr. President (Feliz cumpleaños señor Presidente)» el 19 de mayo de 1962 para John F. Kennedy en una gala celebrada por sus 45 años, 10 días antes de la fecha real (29 de mayo).
También fue el lugar donde William Clinton aceptó la nominación demócrata en 1992, pero, sobre todo, como notan algunos observadores, el Garden resultó el escenario el 20 de febrero de 1939 de una reunión de los fascistas de Estados Unidos.
Interesante cuando, en los últimos días, crecen las críticas hacia el magnate tras las revelaciones al diario The New York Times de John Kelly, un exgeneral de cuatro estrellas de la Marina y su exjefe de gabinete que lo tildó de fascista.
Como hace 85 años, también grupos protestaron afuera mientras dentro del Garden había ruidos y algarabía.
Resulta evidente y es plausible como el poder mediático contrario en EEUU y en todas partes (también Costa Rica), hacen su faena política. Y para ello recurren a eventos del pasado, como los hechos destacados en Madison Square Garden, donde demuestran su imposibilidad de luchar sin evidencias. Y resulta, ni lo disimulan. Quieren convencer a los gringos de su malestar por la forzosa saturación migratoria. Algo parecido sufre nuestro país con la avalancha enviada por Ortiga, el cual nos manda gente muy buena, pero muchos enferma, sin escrúpulos e indeseables. Ya es hora de escoger y seleccionar las gentes, con leyes más rígidas por cuanto, como sucede en casa de Trump, debe repartirse las cuotas de poder y votantes, que no son leales a sus respectivos países. No es sacar los que están instalados, quienes ya tienen sus derechos, sino los de aquí en adelante, sean evaluados. Aunado a ello, con el paralelismo que vive la USA-CR, de saturación en todos los servicios (salud-trabajo-vivienda-inseguridad-educación-etc.) ya el costarricense promedio está siendo desplazado, dándosele una calidad de vida erosionada donde el sistema sufre una real hartazgo en todos los reglones señalados. A diario, usted costarricense, lo padece.