Moscú, 22 nov (Sputnik).- El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia condenó enérgicamente los ataques israelíes lanzados contra la histórica ciudad siria de Palmira, calificándolos de una grave violación de la soberanía del país y del derecho internacional.
«Condenamos enérgicamente este ataque que, según las autoridades sirias, dejó 36 personas muertas y más de 50 heridas, y causó una destrucción grave de edificios residenciales. Esta acción militar de Israel en territorio sirio, así como todas las anteriores, es una violación flagrante de la soberanía del país y de normas básicas del derecho internacional», declaró este viernes la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova.
La diplomática llamó a los países involucrados en la escalada regional a «escuchar la voz de la razón» y «no ir más allá del marco de un comportamiento civilizado basado en el sistema de valores humanistas, ya formado para el siglo XXI».
«Hay que recordar que la pérdida definitiva del respeto mutuo hacia los vecinos de la región y el calentamiento extraordinario del conflicto podrían perjudicar la perspectiva de una paz duradera en Oriente Medio», señala el mensaje.
El pasado 20 de noviembre, el Ministerio de Defensa de Siria informó sobre el ataque de la Fuerza Aérea israelí a la histórica ciudad siria de Palmira que, además de provocar víctimas mortales y heridas a la población, también causó daños graves a los edificios.
Israel continúa operaciones bélicas en múltiples frentes, ante todo, contra el movimiento palestino Hamás en la Franja de Gaza, con más de 44.900 víctimas mortales y más de 104.200 heridos en poco más de un año, y contra la milicia chií Hizbulá en el Líbano, con casi 3.600 muertos y más de 15.200 heridos hasta la fecha.
Paralelamente, las Fuerzas de Defensa de Israel realizan ataques esporádicos en territorio de Siria e Irán, así como intercambian disparos de misiles con los rebeldes hutíes que controlan el noroeste de Yemen.
Hizbulá, junto con Hamás, las fuerzas hutíes del movimiento Ansar Alá y las milicias proiraníes de Irak y Siria, forma parte del llamado ‘eje de resistencia’ contra el Estado hebreo en Oriente Próximo. (Sputnik)
