Quito, 28 feb (Prensa Latina) La vicepresidenta de Ecuador, Verónica Abad, acudió hoy a la Asamblea Nacional (Parlamento) y pidió al Legislativo fiscalizar derechos que se le habrían vulnerado por parte del Gobierno del presidente Daniel Noboa.
Han actuado sin pruebas, afirmó la vicemandataria en referencia a la decisión del juez Guillermo Ortega, del Tribunal Contencioso Electoral (TCE), quien la víspera le suspendió sus derechos políticos por dos años y le impuso una multa de 14 mil 100 dólares por presunta violencia política de género contra la canciller, Gabriela Sommerfeld.
Según Abad, el fallo del TCE es una cortina de humo, pues busca distraer la atención de la ciudadanía en casos de relevancia como las denuncias de irregularidades en la compra de chalecos y cascos para las Fuerzas Armadas o las acusaciones de comercialización ilegal de combustible en Petronoboa, empresa del hermano del mandatario.
También mencionó como asuntos importantes en el escenario nacional el proceso de concesión del campo petrolero Sacha, el más productivo del país, y el caso de los cuatro niños de Guayaquil desaparecidos y asesinados a finales de 2024, que envuelve a militares.
Debemos exigir respuestas a estos casos en los que sí hay pruebas, insistió Abad en declaraciones a la prensa.
En ese contexto, solicitó a la Asamblea investigar a ministros de Noboa, como la vicepresidenta encargada, Cynthia Gellibert; la ministra de Trabajo, Ivonne Núñez; la canciller, Sommerfeld; el ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo; y el del Gobierno, José De La Gasca.
«No me han dejado trabajar, no me han dejado cumplir las funciones para los ecuatorianos», afirmó la vicegobernante.
Por su parte, la abogada de Abad, Dominique Dávila, explicó que examinarán las resoluciones del TCE, para determinar si procede la apelación o recursos de aclaración y ampliación.
Dávila agregó que la suspensión de los derechos políticos de Abad es inconstitucional por su condición de vicepresidenta y recalcó que seguirá en su cargo.
Abad y Noboa mantienen una controversia desde el inicio del mandato.
En el contexto del proceso electoral, Noboa, aspirante a la reelección, no pidió licencia para la campaña previa a la primera vuelta de los comicios, ni le cedió el poder a Abad.
El jefe de Estado designó por decreto a Cynthia Gellibert como vicepresidenta encargada y la dejó al frente del Ejecutivo en los momentos en que salió del cargo para actos proselitistas.
Abad acusó a Noboa de acoso para forzarla a dimitir y evitar dejarla al frente del Gobierno durante la campaña.
En ese escenario hubo una serie de demandas y contrademandas.
El Gobierno de Noboa llegó a suspender a Abad por cinco meses, una sanción administrativa que fue anulada por la Justicia, pero aún así la designó como consejera en la embajada en Türkiye.
Ante toda esa situación, la vicemandataria permanece en territorio ecuatoriano y denunció un golpe de Estado por parte del propio presidente.