Ankara, 21 mar (Sputnik).- El Ministerio de Exteriores turco condena enérgicamente la destrucción por parte Israel del Hospital de la Amistad Turco-Palestina en la Franja de Gaza, que las autoridades locales utilizaron como hospital oncológico.
«La destrucción deliberada del hospital que presta servicios médicos a los civiles de Gaza forma parte de la política de Israel de hacer inhabitable Gaza y obligar a los palestinos a que se muden. Llamamos a la comunidad internacional a que adopte medidas concretas y preventivas contra los ataques ilegítimos y el terror de estado sistemático de Israel», señaló la Cancillería turca.
🚨 Israel bombs Turkish-Palestinian Friendship Hospital in Gaza
➡️ The Israeli army has blown up the hospital, built by Türkiye to provide critical medical care in the besieged enclave pic.twitter.com/2li5xh3uFh
— Anadolu English (@anadoluagency) March 21, 2025
Los responsables del genocidio en Palestina, agregó, especialmente el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, «tendrán que rendir cuentas tarde o temprano ante el derecho internacional».
La noche del 17 al 18 de marzo, el ejército israelí reanudó los ataques contra la Franja de Gaza. El primer ministro del país, Benjamín Netanyahu, aseguró que la decisión se debía a la negativa del movimiento palestino Hamás a aceptar el plan estadounidense de extender el alto el fuego y liberar a los rehenes.
El Ministerio de Salud del enclave palestino informó que el número de muertos por los ataques israelíes contra la Franja de Gaza superó los 590.
Del 19 de enero al 1 de marzo en la Franja de Gaza rigió un alto el fuego en el marco del acuerdo entre Israel y Hamás sobre la liberación de rehenes israelíes a cambio de presos palestinos.
Durante seis semanas los grupos palestinos liberaron a 30 rehenes vivos y entregaron los cuerpos de ocho fallecidos. A su vez, Israel puso en libertad a unos 1.700 presos palestinos y retiró tropas desde el interior de la Franja de Gaza.
Al expirar oficialmente la tregua, las hostilidades seguían sin reanudarse por los intentos de los mediadores de involucrar a las partes en unas negociaciones continuas sobre un acuerdo en Gaza.
Sin embargo, Israel dejó de suministrar electricidad a la planta desalinizadora en Gaza y cerró el acceso a la entrada de camiones de ayuda humanitaria al enclave.
Para la fecha, Hamás aún retiene en la Franja a 59 rehenes, la mitad de los cuales oficialmente se dieron por muertos. (Sputnik)