Naciones Unidas, 16 feb (Sputnik).- El plan de respuesta humanitaria de 2023 para el noreste de Nigeria, lanzado este jueves, requiere 1.300 millones de dólares para brindar la asistencia vital a seis millones de personas que sufren los efectos devastadores del conflicto armado, según el informe de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
«Se estima que 2,4 millones de personas están en extrema necesidad, afectadas por el conflicto, desastres naturales y enfermedades, y necesitan la asistencia urgente», dijo el coordinador residente y humanitario de la ONU en Nigeria, Matthias Schmale, y precisó que «la crisis humanitaria y de protección a gran escala no muestra signos de disminuir».
El informe indicó que cerca de 4,4 millones de personas experimentarán inseguridad alimentaria durante la temporada de carestía en 2023, en comparación con 4,1 millones de personas en 2022, mientras que en la localidad de Bama, el estado nigeriano de Borno, 4.000 personas caigan en una ‘catástrofe’ sin acción urgente.
Se prevé que los niveles ya altos de desnutrición aguda entre los niños en el noreste de Nigeria se dupliquen con creces, de 300.000 afectados el año pasado a 697.000 este año, precisó.
En el marco del plan de respuesta humanitaria 120 socios operativos trabajarán en apoyo de los esfuerzos del Gobierno para salvar vidas, mejorar la calidad de vida, proteger a los más vulnerables y permitir que las personas afectadas regresen a la normalidad y vivan con seguridad y dignidad.
En 2023, los socios humanitarios continuarán monitoreando y respondiendo a las necesidades humanitarias significativas en otras partes de Nigeria, agregó el informe.
A pesar de enfrentar severas limitaciones de acceso y financiación, la comunidad humanitaria brindó ayuda a 4,7 millones de personas en 2022 gracias al generoso apoyo de los donantes. (Sputnik)
La OCHA ve necesario recoger $1.300 millones para brindar ayuda en el noreste de Nigeria
