¿Vuelta al pasado? ¿Un eterno presente? ¿Sería más adecuado nombrar de una vez los pilares fundamentales en que descansa la salud del dios capital: acumulación, competencia y plusvalía? ¿Quedaría más pertinente ir directo a los efectos en los seres humanos y la naturaleza: explotación, miseria, contaminación y muerte?
Cuando Carmen Lyra publicó en 1931 Bananos y hombres, puso la siguiente aclaración: “En las fincas de banano se le guardan más consideraciones a una mata de banano que a un peón”. Ella estaba haciendo una denuncia como parte de la lucha por erradicar esa situación deshumanizante para construir una sociedad más justa e igualitaria.
Desdichadamente, todo lo que fue la lucha de quienes nos antecedieron por dejarnos un país con algún índice de respeto a los derechos humanos, se ha ido socavando en estos cuarenta años ya de guerra contra la vida humana y la Madre Tierra. Si quien lee, piensa que exagero, apenas me da el espacio para nombrar la punta de un iceberg.
El martes 2 de mayo circuló en redes una fotografía donde se ve un bulto con una tela azul que lo tapa. Según la versión difundida, era un trabajador de la empresa Fresh Del Monte CR de la finca DUACARI 2 que se sintió mal y le hizo dos peticiones a la empresa. La primera, en la mañana, la posibilidad de irse a su casa y le fue negada. La segunda, antes de morir, pidió que lo llevaran al hospital en el vehículo de la empresa y se lo negaron. De acuerdo con sus compañeros, una vez muerto solo lo taparon con una sábana y la “compañía siguió procesando porque las cajas se debían sacar sin importar el DOLOR”.
El dirigente sindical Didier Leitón confirmó la noticia y, además, informó acerca de la muerte de otro obrero en marzo en Duacarí 3; ambas en Guácimo.
No faltará quien afirme que dos obreros no son para acusar a la empresa. Sin embargo, la forma en que, supuestamente, maltrataron a ese trabajador moribundo permite repetir con Carmen Lyra la fruta, o sea la ganancia, la acumulación y la codicia explotan hasta dejar sin aliento a las personas trabajadoras.
Si continúa el escepticismo, invito a leer los reportajes de LAIZQUIERDADIARIO: Standard Fruit Company. Obreros denuncian afectaciones a raíz de uso ilegal de químicos en bananera[1]; Abusos patronales. Movento OD 15: El químico con el que envenenan a obreros bananeros[2] ;Denuncia. Bananeras en Sarapiquí deforestan y destruyen espacios comunitarios como plazas de deportes[3].
En los primeros, se describe el abandono empresarial en que están dichos trabajadores, porque la empresa no dio ninguna de las protecciones que requería el “veneno” en cuestión. Por otra parte, el aparente abandono social, pues ni el INS ni la CCSS les ha dado la protección requerida. Las fotografías y los testimonios que acompañan dan escalofríos. Si quien lee, pertenece al manso y adiestrado ejército de repetidores de la voz oficial, y empieza con el consabido anticomunismo, le invito cordialmente a ver la fuente del tercer reportaje, observe en la televisora local a la infancia con pancartas, escuche a las personas de esa comunidad explicando la forma en que la bananera les despoja de la plaza de deportes, tala árboles y rompe acuerdos que se habían tomado. Del Monte es ocupante ilegal de 40 hectáreas en el territorio indígena de Salitre.
Ahora, tristemente, hay que decir bananeras, piñeras, meloneras, etc. El 16 de abril circuló en redes un vídeo de una televisora española. El noticiero explicaba el porqué Alemania rechazó un cargamento de melones: la presencia excesiva de Clorotamil, dicho pesticida fue prohibido en la Unión Europea desde el 2020 por su incidencia en el cáncer. Aquí es el cuarto agroquímico más usado. El reportaje incluye el testimonio de un ingeniero agrónomo y voceras de la comunidad de Oreamuno[4]. Se suma, además, que el Incopesca amplió la lista de 34 a 234 los ejemplares de flora y fauna sujetos a explotación, entre los que están iguanas, tortugas, corales.[5]
A esta sangría lenta, silenciosa y cobarde de la vida natural y de las personas trabajadoras, hay que sumar que la voracidad de los Rodrigos (el Chaves y el Arias) no tiene límites, van con todo. La jornada 4/3 es a la clase trabajadora lo que es la estocada final para el toro.
(*) Isabel Ducca D.
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[1] Anónimo. (2022, febrero 4). Standard Fruit Company. Obreros denuncian afectaciones a raíz de uso ilegal de químicos en bananera. LAIZQUIERDADIARIO.
https://www.laizquierdadiario.cr/Obreros-denuncian-afectaciones-a-raiz-de-uso-ilegal-de-quimicos-en-bananera
[2] Zeledón, P. 2022, marzo 26). (El químico con el que envenenan a obreros bananeros.. LAIZQUIERDADIARIO.
https://www.laizquierdadiario.cr/Movento-OD-15-El-quimico-con-el-que-envenenan-a-obreros-bananeros
[3] Anónimo. (2023, abril 24). Denuncia. Bananeras en Sarapiquí deforestan y destruyen espacios comunitarios como plazas de deportes. LAIZQUIERDADIARIO.
https://www.laizquierdadiario.cr/Bananeras-en-Sarapiqui-deforestan-y-destruyen-espacios-comunitarios-como-plazas-de-deportes
[5] Murillo, A. (2023, mayo 4). Incopesca mete tortugas, iguanas y corales en la lista de especies para explotar. Semanario Universidad. https://semanariouniversidad.com/pais/incopesca-mete-tortugas-iguanas-y-corales-en-la-lista-de-especies-para-explotar/
Gracias Isabel por esta denuncia que horroriza de solo imaginar que esto siga ocurriendo. Y que desgraciadamente parece que si algo se había avanzado lo estamos dilapidando. Vamos hacia la nueva esclavitud, si la que todos apoyarán porque ya los luchadores se acabaron. Tenemos un pueblo dormido, un pueblo que aplaude a sus esclavistas.
Estas empresas trasnacionales funcionan por toda América y el mundo, con el contubernio, no solo mediático sino, político-legal y ambiental, donde por décadas han hecho lo que les venga en gana. Han devastado cientos de miles, millones de hectáreas, como seres vivos y humanos, todo por lucrar con nuestras tierras. Les importa un maní las críticas y señalamientos donde la voluntad política judicial y económica es un trillado cuadro dentro de cualquier pared pública. Nos hemos acostumbrado a tales realidades, donde los pueblos se llenan la boca con una añeja galopante corrupta democracia que ha olvidado, enterrado al hombre y su entorno. Hasta tanto, el nacional tenga las agallas y sapiencia de nombrar un presidente y diputados con principios, valores y moralidad acorde a sus solemnes prioridades de integridad, rectitud y justicia, no saldremos de ese atolladero. ¿Será más fácil encontrar un alfiler en un pajar de 1000 metros que un hombre de ese calibre? Difícil pero no, imposible. Soñar no cuesta nada y otras sociedades lo han logrado.
¡Vaya despropósito de artículo! Habla de explotación laboral en industrias fruteras y, de repente, saca la jornada 4/3 de la manga sin justificación alguna. ¿Qué relación tiene con los abusos laborales que menciona? ¿Está insinuando que la jornada 4/3 genera estas condiciones laborales? Debería aclararlo en lugar de dejarlo flotando en el aire como si fuera un globo chino. Y, por cierto, las bananeras no son propiedad de Rodrigo Chaves. Sabemos que el empresario detrás de ese negocio pertenece al partido de oposición, el PLN. Este tipo de redacción perezosa y confusa no contribuye a nada, solo confunde y distrae de las verdaderas problemáticas.
Trabajadores bananeros que mueren en el 2023 sin que la CCSS se interese por el régimen laboral y de salud ocupacional existente. Niños y maestros rociados de agroquímicos por las piñeras sin que el ministerio de salud se mueva y que el MAG ordene suspender las fumigaciones. Somos una auténtica BananaRepublica y nada cambió en las bananeras y ahora en las piñeras desde libros como Bananos y Hombres de Carmen Lyra de 1931 o la obra Mamita Yunai de Calufa escrita en 1940. En este 2023, nuestro problema es que nos hacen MUCHA FALTA intelectuales valientes que denuncien estas cosas, como lo fueron Carmen Lyra y Calufa.