Río de Janeiro (Brasil), 12 may (Sputnik).- El juez del Tribunal Supremo Federal Alexandre de Moraes autorizó el jueves que el exministro de Justicia y Seguridad Pública Anderson Torres, funcionario del pasado gobierno de Jair Bolsonaro (2019-2023), deje la cárcel de Brasilia, donde está preso desde enero por su presunta implicación en los actos golpistas.
En un comunicado, la corte Suprema informó que De Moraes «revocó este jueves el arresto preventivo de Torres y determinó la imposición de medidas cautelares alternativas a la prisión».
Entre estas medidas figuran el uso de tobillera electrónica, la prohibición de salir del Distrito Federal, la prohibición de usar redes sociales y comunicarse con otros investigados y la posibilidad de usar armas.
Para el juez, la prisión preventiva de Torres «cumplió su finalidad», ya que recientemente fue interrogado y la investigación sigue en marcha.
Torres fue arrestado porque el 8 de enero, cuando miles de bolsonaristas atacaron los principales edificios públicos de Brasilia él era el máximo responsable de la seguridad de la capital.
Era secretario de Seguridad del Distrito Federal pero en ese momento estaba fuera del país, a pesar de que ya había informaciones confidenciales que alertaban de un acto potencialmente peligroso en Brasilia, y además descabezó a la cúpula de seguridad pocos días antes.
Además de una posible actitud negligente y de complicidad con los golpistas, la policía encontró en su casa un borrador de un decreto que Bolsonaro podría haber firmado tras perder las elecciones.
El documento pretendía anular los poderes de la Justicia Electoral y revertir la derrota, por lo que en la práctica los investigadores lo consideran un borrador del golpe de Estado que buscaba Bolsonaro y su círculo más cercano.
Torres también está siendo investigado porque cuando aún era ministro de Justicia de Bolsonaro movilizó a la Policía de Carreteras el día de las elecciones para que realizara cortes y bloqueos de vías en regiones donde Lula da Silva tenía más apoyos, para impedir el voto de cientos de electores y beneficiar así la candidatura del entonces presidente. (Sputnik)
En todas partes se cuecen habas. Este juez está demostrando con su resolución el desprecio a la legitimidad de Lula, donde ese implicado fue, como Trump en la USA, tener vela en ese entierro. Así hoy los poderes de justicia se burlan de nuestras democracias, cuando son acérrimos aliados de poderosos encubiertos. No es solo Brasil, sino la moda, aquí y en la Conchinchina. “Defectos” democráticos, donde el ordenamiento jurídico de poderes se da el tupe y libertad de intervenir.