Belgrado, 30 jun (Sputnik).- A los serbios que viven en el norte de Kosovo y en Metohija les amenaza una catástrofe humanitaria por la prohibición impuesta por las autoridades albanokosovares de importar víveres y medicamentos desde la parte central de Serbia, dijo este viernes a Sputnik el exjefe del municipio de Zvecan y vicedirector de un hospital de Kosovska Mitrovica, Dragisa Milovic.
El director de ese centro médico, el doctor Zlatan Elek, el 22 de junio informó a esta agencia que con esa prohibición cesaron los suministros del oxígeno y fármacos al centro médico de Kosovska Mitrovica, que ya antes tenía problemas con el aprovisionamiento de todo lo necesario y durante la última semana la situación empeoró aún más.
«Escasean medicamentos y material médico, hasta vendas. Instituciones médicas, de puericultura y educativas tienen problemas con la comida, también los afronta la población. Productos básicos como leche, carne, pan y harina son suministrados de Serbia central. Las existencias se agotan, si la prohibición de importarlos se prorroga, nos amenaza una catástrofe humanitaria. Instamos a la comunidad internacional a que ejerza influencia sobre Pristina, que está dando pasos ilegítimos», señaló Milovic.
Los serbios del norte de Kosovo y Metohija organizan desde hace un mes protestas pacíficas ante las sedes de las alcaldías de Zvecan y Leposavic contra los intentos de Pristina de lograr que ocupen sus cargos los alcaldes albanokosovares elegidos en los comicios municipales del 23 de abril, que fueron boicoteados por los serbios locales, así como contra el comportamiento arbitrario de la policía kosovar y las detenciones con uso de la fuerza de sus ocho compatriotas.
El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, reunido el 22 de junio con el jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrel, y el enviado especial para el diálogo entre Belgrado y Pristina, Miroslav Lajcak, les entregó un informe sobre las palizas y vejaciones usadas contra los serbios detenidos por la policía kosovar.
Los conductores de los camiones con matrícula serbia y cargas procedentes de la parte central de Serbia siguen bloqueando las carreteras al lado del retén de entrada en Kosovo y Metohija desde que las autoridades albanokosovares prohibieron la importación de mercancías serbias, pero permiten pasar a los camiones serbios que llevan cargas extranjeras.
Vucic declaró a principios de junio que no fueron los militares del KFOR quienes provocaron el 29 de mayo los choques con los participantes de las protestas, sino los policías de la autoproclamada república de Kosovo.
Kosovo, poblado mayoritariamente por albaneses, proclamó en 2008 una independencia unilateral de Serbia, siendo reconocido por Estados Unidos, Canadá y la mayoría de los países miembros de la UE, pero no por Serbia, Rusia, China, España, Grecia, Irán y otras naciones. (Sputnik)
