San José, 3 jul (EP/PL).- Ministros de Relaciones Exteriores y de Ambiente de Costa Rica y Guatemala reafirmaron su compromiso con el cuidado del medio ambiente, informó hoy aquí la cancillería.
Durante la ceremonia de traspaso de la Presidencia Pro Tempore de la Asociación Independiente de América Latina y el Caribe (AILAC), de Costa Rica hacia Guatemala, ambas naciones resaltaron la importante en la colaboración regional para hacer frente al cambio climático y promover un desarrollo sostenible en América Latina y el Caribe.
AILAC está integrada por Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay y Perú.
El canciller de Costa Rica, Arnoldo André, destacó que en el periodo como presidencia Tempore, de AILAC, esta nación desempeñó un papel destacado en la defensa de las líneas de negociación que representan las políticas y acciones para enfrentar el cambio climático y promover la sostenibilidad en la región.
Mediante nuestro liderazgo fueron impulsadas iniciativas para la reducción de emisiones y s fortalecidos los lazos de cooperación entre los países miembros, resaltó el ministro André.
A la par, el ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, Mario Búcaro, manifestó que su país asume ahora el liderazgo de AILAC con el compromiso de dar continuidad a los logros alcanzados y seguir promoviendo una agenda ambiciosa en materia de cambio climático y sostenibilidad.
Durante la ceremonia oficial además se llevó a cabo la entrega del informe de la PPT de Costa Rica.
Este traspaso marca un momento clave en el fortalecimiento de la cooperación regional y la consolidación de una agenda común para abordar los desafíos del cambio climático en América Latina y el Caribe.
La asociación como grupo formal de negociación fue creada bajo la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático, en diciembre de 2012, durante la Conferencia de las Partes de Doha, Qatar.
Desde entonces, la misión de este grupo de negociadores de ocho países ha sido generar posiciones coordinadas, ambiciosas y progresistas que aporten positivamente al balance en las negociaciones multilaterales sobre cambio climático, considerando una visión coherente con el desarrollo sostenible y responsable con el medio ambiente y las futuras generaciones.
