San José, 31 jul (EP/PL).- Las autoridades costarricenses informaron recientemente que hubo 500 homicidios en lo que va de 2023, pero solo este fin de semana fueron asesinadas nueve personas, cinco de ellas en la provincia de Limón.
Lo más significativo de esas estadísticas es que en esa oriental demarcación, los cinco asesinatos ocurrieron en solo 24 horas, puntualiza un reportaje del noticiario Teletica.
La ola de homicidios que afecta el país es calificada por expertos como histórica. En 2021 las estadísticas contabilizan 588 y en 2022 fueron 657.
Mientras en este 2023, hasta la fecha son registradas 511 muertes violentas, 147 más que en igual periodo del año anterior.
En la capital San José, perdieron la vida 131 personas, 126 en limón, 80 en Puntarenas, 57 en Alajuela, 51 en Guanacaste, 30 en Heredia y 36 en Cartago.
A juicio de expertos, la mayoría de los asesinatos obedecen a ajustes de cuentas por drogas, que en medio de los sucesos han quedado víctimas inocentes.
Sin embargo, las muertes cada vez más ascendentes ocurren también por accidentes de tránsito, suceso que ha cobrado la vida a 284 personas en lo que va de año, 172 de esos por colisiones, 50 en atropellos y 62 por vuelcos de vehículos.
A esto se suma que mil 560 personas fueron trasladadas a centros hospitalarios en condiciones de críticos por los sucesos en carreteras fundamentalmente.
Autoridades de la fuerza pública, de emergencia y la Cruz Roja explicaron que muchas de las causas de estos accidentes son el exceso de velocidad, las imprudencias, conducir bajos efectos del alcohol y el desconocimiento de las rutas transitadas.
