San José, 13 oct (Elpaís.cr).- La política exterior de Costa Rica da tumbos en casos relacionados con Honduras, Palestina y China, lo que le ha valido una llamada de atención a la cordura al Gobierno de Costa Rica, por parte del politólogo Claudio Alpízar Otoya.
En el caso de Honduras, Costa Rica decidió exigir visa a los ciudadanos de ese país con la excusa de combatir a sicarios y narcotraficantes, que bien podrían las autoridades detener en las fronteras y no cerrando el comercio entre las dos naciones, afirma Alpízar.
En cuanto al ataque del Grupo Hamás a Israel, el analista llama la atención a los diputados oficialistas no haber condenado la acción justificando su decisión en la neutralidad de Costa Rica.
Sobre China, llama la atención que altos funcionarios del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones cuestionen por un asunto de tecnología 5G la organización política de esa nación asiática y confunda los alcances del Convenio de Budapest sobre colaboración de los países en seguridad con un tema de ciberseguridad.
El siguiente es el análisis de Apízar Otoya, distribuido en redes sociales:
No olvidemos que ciertos «analistas-poli-ticos» antes de ello, son primero parte de la mafia política tradicional, y dan sus apreciaciones moviendo la balanza y ritmo e interés de tales nefastas gentes. Chaves debe ser obediente a las órdenes externas de la potencia del norte en cuanto China, Rusia y hasta la Conchinchina. Israel es la cueva o seno de los dominadores del mundo, súper multimillonarios y está haciendo desmadres con los palestinos, para avanzar luego, por el petróleo árabe. En cuanto las visas a hondureños, un montado escenario para distraer tontos. El verdadero problema es la absurda permitida inyección foránea de cientos de miles de problemas sociales, del norte y el sur, donde este gobierno y los anteriores han incentivado con el objetivo de debilitar y aplastar nuestras instituciones estatales a tal punto de buscar la privatización. No en balde ciertos bancos privados (¿judíos?) blanquean capitales en las narices de los controles mundiales y nacionales, con el contubernio legislativo tradicional, le pone la cereza al pastel y realidad costarricense. Y de ello, nanay. Atreverse que mi siempre apreciado, oportuno y valiente diente de yuca se ponga amargo y contrario a esas corrientes, sería acusado de narco cómplice, criminal, desenfrenado sexual y enemigo de nuestras democracias. Y corre el riesgo de ser silenciado por siempre. Esos observadores pretenden meternos con lavativa al costarricense las ya tradicionales corruptelas por siempre, donde ellos se han acomodado como quintacolumnistas.
Ahora resulta que si uno es afín a algún partido político debe abstenerse de opinar. Creo que no.
En cuanto a los tumbos que da la política diplomática del país, bueno no podría ser diferente en este gobierno todo da tumbos, ocurrencias descabelladas, medidas confrontativas o absurdas en su extremo. Este gobierno es lo peor de lo peor, corrupto, mentiroso, ridículo no solo en lo nacional sino en lo internacional.
Realmente da lástima Costa Rica con este gobierno tan remalo, inepto e insensato.