Ciudad de México, 27 nov (Prensa Latina) El presidente Andrés Manuel López Obrador respondió hoy a ministros de la Suprema Corte contrarios a ser elegidos por el pueblo para sus cargos, que sí es posible hacerlo.
A la pregunta de una periodista en su conferencia de prensa matutina en el Palacio Nacional, explicó que hace falta hacerlo, pero para que se lleve a cabo ese proceso tendría que hacerse una reforma constitucional aprobada en el congreso con mayoría calificada.
De esa manera se podría avanzar para iniciar la limpieza en el Poder Judicial de la corrupción que impera allí, porque si no lo hacemos quedaría pendiente resolver el problema de esos jueces y magistrados corruptos, expresó.
Hay excepciones, pero en general impera la corrupción entre jueces, magistrados y ministros que hacen y deshacen con un pensamiento muy conservador, reaccionario y antipopular.
El derecho se creó, dijo, para atender a todos, a las minorías y no solo a los que tienen dinero, y muchos de los magistrados están muy alejados de la justicia, aunque estén cerca del derecho.
Puso como ejemplo casos repetitivos de que detienen un presunto delincuente con todas las pruebas y sin embargo lo pueden dejar libre usando pretextos baladíes como que no se elaboró bien la averiguación o que se faltó una firma, y lo liberan, aunque se trate de un delincuente que causó pérdidas de vidas.
A los ministros que dijeron en la feria de Guadalajara que no se puede aplicar la elección por votación popular, les reiteró que sí era posible.
¿Cómo no va a ser posible solamente con ellos cuando todos los cargos públicos, desde el presidente de la República, gobernadores de estado, alcaldes, senadores y diputados son elegidos así?. ¿Por qué no igual un juez, un ministro, un magistrado?
Se preguntó cómo impartir justicia de forma pareja si son designados por una especie de consejo de sabiondos, un consejo supremo de eminencias y no del pueblo, o que lo eligieran los oligarcas de manera descarada que no piensan en la democracia sino en los intereses de la oligarquía, y dejan fuera al pueblo.
Dijo que les cuesta mucho entender que el pueblo es el soberano, el que manda y no puede haber un sistema político denominado por una élite.
