Barcelona, 23 Feb. (EUROPA PRESS) – El pleno de Barcelona de este viernes ha aprobado una proposición con contenido de declaración institucional del PSC (quien gobierna) que acuerda declarar «los efectos de un abuso» de los niños y adolescentes a las redes sociales como un problema de salud pública.
La proposición, que ha contado con los votos a favor del gobierno, Junts, BComú, ERC y PP, y la abstención de Vox, también pide ofrecer orientación y digital a los menores, entidades y familias, además de crear una guía de buenas prácticas.
También insta a la Generalitat, al Gobierno y a la Unión Europea a impulsar «medidas oportunas» en salud pública y salud mental infantil y juvenil estableciendo controles públicos sobre los algoritmos que se desarrollan.
Un problema de «salud en general»
La concejal de Junts Titón Laïlla ha considerado que el uso de las pantallas no es sólo un problema de salud mental, sino «de salud en general», y ha lamentado que el gobierno no la presente como una medida de gobierno, a lo que la teniente de alcalde Maria Eugènia Gay ha respondido mostrando su compromiso para llevarlo a cabo.
Gemma Tarafa (BComú) ha pedido abordarlo de manera constructiva y con los jóvenes, aunque esperaba «una proposición más valiente», y Rosa Suriñach (ERC) ha considerado que las empresas tecnológicas también deben tomar responsabilidades.
Víctor Martí (PP) ha pedido «coherencia y autocrítica» al gobierno para revisar las medidas que lleva y ha llevado a cabo, y Liberto Senderos (Vox) le ha pedido que afronte sus responsabilidades.