Ciudad de México, 21 mar (Sputnik).- La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico, central) acordó por mayoría bajar la tasa de interés de referencia 25 puntos base a 11 por ciento, en su primer recorte aplicado en tres años, luego de mantener por un año su tasa de interés en 11,25 por ciento para contener la inflación.
«La Junta de Gobierno, con la presencia de todos sus miembros (cinco), decidió por mayoría reducir en 25 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 11,00 por ciento», informó en un comunicado la entidad autónoma, en su decisión de política monetaria.
La inflación general anual, que había aumentado a finales de 2023 y en enero de 2024, disminuyó en febrero a 4,40 por ciento, indica el informe de la decisión del banco estatal.
«El descenso reflejó cierta reversión del componente no subyacente que la había presionado. Además, la inflación subyacente (que descarta los precios volátiles) siguió disminuyendo, ubicándose en 4,64 por ciento en febrero», explica el documento.
Las expectativas de inflación general para el cierre de 2024 registraron una reducción.
«Con esta decisión, la postura monetaria se mantiene restrictiva y continuará siendo conducente a la convergencia de la inflación a la meta de 3 por ciento en el horizonte de pronóstico», es decir el segundo trimestre del año próximo 2025.
Los pronósticos de inflación general y subyacente presentan ajustes marginales en algunos trimestres con lo que se han mantenido relativamente estables en las últimas decisiones.
«Se sigue anticipando que la inflación general converja a la meta en el segundo trimestre de 2025», pronostica la junta de Gobierno de Banxico.
Asimismo, la autoridad monetaria mexicana prevé que el «proceso desinflacionario continúe, ante la postura de política monetaria y la mitigación de los choques derivados de la pandemia y de la guerra en Ucrania».
Estas previsiones están sujetas a riesgos al alza y a la baja.
Al alza son seis factores: persistencia de la inflación subyacente; depreciación cambiaria; mayores presiones de costos; que la economía muestre una resiliencia mayor a la esperada; afectaciones climáticas; y escalamiento de conflictos geopolíticos.
A la baja son tres elementos: «una desaceleración de la economía global mayor a la anticipada; un menor traspaso de algunas presiones de costos; y que los niveles más bajos del tipo de cambio en relación con los primeros meses del año pasado contribuyan más que lo anticipado a mitigar ciertas presiones sobre la inflación».
Los directivos del Banxico consideran que el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico se mantiene sesgado al alza.
Cuando Banco de México elevó la tasa nominal a 11,25 por ciento, en marzo del año pasado 2023, la inflación mostraba un incremento anual de 7,23 por ciento.
Desde ese momento y hasta febrero del 2024, la inflación se ha moderado hasta registrar una variación de 4,40 por ciento, mencionado por los directivos de Banxico. (Sputnik)
