Madrid, 7 May. (EUROPA PRESS) – La misión Solar Orbiter de la ESA ha logrado filmar la transición de la atmósfera inferior del Sol a la corona exterior, mucho más caliente.
Las estructuras parecidas a pelos están hechas de gas cargado (plasma), siguiendo las líneas del campo magnético que emergen del interior del Sol, como se aprecia en un vídeo producido por la ESA.
Las regiones más brillantes rondan el millón de grados Celsius, mientras que el material más frío parece oscuro porque absorbe radiación.
Este vídeo fue grabado el 27 de septiembre de 2023 por el instrumento Extreme Ultraviolet Imager (EUI) del Solar Orbiter. En ese momento, la nave espacial se encontraba aproximadamente a un tercio de la distancia de la Tierra al Sol, y se dirigía a una máxima aproximación de 43 millones de kilómetros el 7 de octubre.
El mismo día en que se grabó este vídeo, la sonda solar Parker de la NASA se desplazó a sólo 7,26 millones de kilómetros de la superficie solar. En lugar de obtener imágenes directamente del Sol, Parker mide las partículas y el campo magnético en la corona solar y en el viento solar. Esta fue una oportunidad perfecta para que las dos misiones formaran equipo, con los instrumentos de teledetección del Solar Orbiter liderado por la ESA observando la región de origen del viento solar que posteriormente pasaría por la sonda solar Parker.
Una característica intrigante visible a lo largo de esta película (en la esquina inferior izquierda) es el gas brillante que forma delicados patrones en forma de encaje alrededor del Sol. Esto se llama «musgo» coronal. Suele aparecer alrededor de la base de grandes bucles coronales que están demasiado calientes o demasiado tenues para ser vistos con la configuración del instrumento elegido.
En el horizonte solar se aprecian agujas de gas, conocidas como espículas, que se elevan desde la cromosfera del Sol y pueden alcanzar hasta una altura de 10.000 kmilómetros
Alrededor del segundo 22 del vídeo destaca una pequeña erupción en el centro del campo de visión, con material más frío que se eleva hacia arriba antes de volver a caer. Esta erupción es más grande que la Tierra.
En el centro izquierda, alrededor del segundo 30, se aprecia la lluvia coronal «fría» (probablemente menos de 10.000 °C) que se ve oscura sobre el fondo brillante de grandes bucles coronales (alrededor de un millón de grados). La lluvia está formada por acumulaciones de plasma de mayor densidad que caen hacia el Sol bajo la influencia de la gravedad.