Washington, 19 Ene. (EUROPA PRESS) – La nave Dragon Endurance atracada en la Estación Espacial Internacional está siendo adaptada con un quinto asiento, a modo de bote salvavidas en una hipotética evacuación del complejo orbital.
Se trata del asiento que el astronauta de la NASA Frank Rubio tiene asignado en la nave Soyuz MS-22, también acoplada en la Estación y para la que se ha previsto un retorno a la Tierra sin tripulación tras registrar un impacto de meteoroide en diciembre que ha reducido su grado de protección térmica.
El traslado del revestimiento del asiento está previsto que comenzase el martes 17 de enero, y la instalación y configuración continuen durante la mayor parte del 18 de enero, informó la NASA en el blog de la misión.
El cambio permite aumentar la protección de la tripulación al reducir la carga térmica en el interior de la nave MS-22 para los cosmonautas Prokopyev y Petelin en caso de un regreso de emergencia a la Tierra.
Una vez que la Soyuz MS-23 de reemplazo llegue a la estación espacial el 22 de febrero, el revestimiento del asiento de Rubio se transferirá a la nueva Soyuz y los de los asientos de Sergey Prokopyev y Dmitri Petelin se trasladarán de la MS-22 a la MS-23 antes de su regreso en la Soyuz.
