Kampala, 19 Jun. (EUROPA PRESS) – El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, se ha pronunciado sobre el ataque perpetrado este fin de semana por las milicias de las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF) contra una escuela de Kasese, en el oeste del país africano, que dejó 41 muertos, sosteniendo que las acciones de estas milicias son «desesperadas y cobardes».
Museveni, que ha trasladado este domingo sus condolencias a las víctimas del ataque, ha declarado que «esta nueva atrocidad por parte de miembros de las ADF» es un «acto desesperado, cobarde, terrorista». Asimismo, ha prometido que el Ejército ugandés seguirá persiguiendo a los rebeldes en la vecina República Democrática del Congo.
El mandatario ha considerado que este ataque ha tenido lugar como respuesta a las operaciones militares contra la milicia, sosteniendo que en los últimos meses las ADF han perdido el control de gran parte del territorio. Para Musevini los soldados han conseguido que los miembros de las ADF hayan retrocedido y que «ya no se puedan concentrar en grandes grupos», puesto que es «más seguro para ellos dividirse en pequeños grupos que esperan que no puedan ser vistos».
Asimismo, ha indicado que el Gobierno congoleño ha dado permiso a las tropas ugandesas para operar en RDC, por lo que ahora «no tienen excusa para no perseguir a los terroristas de las ADF hasta la extinción». «Estamos trayendo nuevas fuerzas al lado de Uganda mientras continuamos la caza en el lado de RDC», ha declarado.
El dirigente ugandés ha insinuado un fallo en la Inteligencia del país, según indica el portal Chimp Reports, ya que ha indicado que «el esquema criminal y cobarde no habría tenido éxito» si las fuerzas de la zona hubieran estado alerta.
«¿Se hizo sonar una alarma y por quién? ¿Cómo respondió la gente de seguridad cercana? ¿Por qué nuestra gente del lado del Congo no tenía inteligencia sobre este grupo disidente», ha cuestionado.
El Ejército de Uganda ha cifrado en 41 la cifra de muertos –37 estudiantes, tres miembros de la comunidad y un guardia de seguridad– en el ataque de las ADF contra la escuela secundaria privada Mpondwe Lhubiriha de esta localidad fronteriza con RDC, principal ámbito de actuación de esta milicia, una de las más violentas del continente, que tuvo sus orígenes no obstante en suelo ugandés.
Las ADF, creadas en la década de los noventa y acusadas de las matanzas de miles de civiles, fue objeto de una escisión en 2019 después de que su líder jurara lealtad al grupo yihadista Estado Islámico en África Central (ISCA), bajo cuya bandera actúa desde entonces. Naciones Unidas les atribuye más de 1.200 asesinatos de civiles tan solo en 2021.
