Moscú, 23 jul (Sputnik).- El Ministerio de Defensa ruso negó su implicación en los destrozos que sufrió anoche ataque la Catedral de la Transfiguración, principal iglesia ortodoxa de la ciudad de Odesa, en el sur de Ucrania.
La información de que los daños en la catedral de Odesa son resultado de un ataque ruso «no se corresponde con la realidad», afirmó esta cartera. Todos los objetivos golpeados anoche, añadió, «se encontraban a una distancia prudente» de ese lugar de culto.
Defensa aseguró que planifica sus ataques en base a una información «minuciosamente verificada» y contrastada a través de varios canales, lo que «excluye de entrada la destrucción de instalaciones civiles» y obras del patrimonio cultural e histórico.
La causa más probable de los daños que sufrió la catedral de Odesa, según el ente castrense ruso, es la caída de un misil antiaéreo como resultado de «una actuación incompetente de operadores de sistemas de defensa aérea, que las Fuerzas Armadas de Ucrania emplazan intencionadamente en barrios residenciales».
En enero de 2023, el Comité del Patrimonio Mundial decidió inscribir el Centro Histórico de Odesa en la Lista del Patrimonio Mundial, reconociendo el valor universal excepcional de este sitio y el deber de toda la humanidad de protegerlo.
La catedral de la Transfiguración de Odesa empezó a construirse en 1794 y fue consagrada en 1808. Durante el período soviético, en 1932, fue cerrada y en 1936, destruida. A principios de este siglo se recreó en su lugar histórico y en julio de 2020 fue consagrada por el patriarca Kiril, máximo jerarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa.
Las imágenes publicadas en las redes sociales este domingo muestran graves daños en el exterior y en el interior de la catedral.
El presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, responsabilizó de los destrozos a Rusia y prometió una inminente represalia.
Más temprano hoy, Defensa informó de un ataque con armas navales y aéreas de precisión y largo alcance lanzado anoche contra «instalaciones en que se preparaban actos terroristas con el uso de lanchas no tripuladas contra la Federación de Rusia y lugares de su fabricación en la zona de la ciudad de Odesa».
Desde el 17 de julio, Rusia sigue golpeando los puertos del sur de Ucrania en represalia por un ataque con drones marinos contra el puente del estrecho de Kerch, en el este de Crimea.
En la noche del 16 al 17 de junio, un ataque con drones marinos provocó la muerte de un matrimonio en el puente del estrecho de Kerch, en el este de Crimea, dejó herida a su hija adolescentes, destrozó la calzada en un tramo de esa estructura que conecta la península con la región rusa de Krasnodar y causó la suspensión del tráfico en plena temporada de vacaciones. (Sputnik)
