Moscú, 20 ago (Sputnik).- La sonda rusa Luna-25 mostró pequeños problemas que provocaron el fracaso del alunizaje de la misión espacial, declaró a Sputnik el científico jefe del Instituto de Investigación Espacial de la Academia de Ciencias de Rusia, Nathan Eismont.
«Había problemas, no es que fuesen significativos, pero había señales, por así decirlo, inquietantes, aun así, todos esperaban que eso se lograse solucionar», dijo Eismont.
El experto indicó que, ante la existencia de una desviación por encima de la norma, se debería de haber esperado para realizar la maniobra, «pero, aparentemente, no fue lo suficientemente preocupante como para pasar a una solución radical».
El científico considera que no habría pasado «nada terrible» si se hubiese tomado la decisión de posponer el aterrizaje.
Este domingo, la corporación espacial Roscosmos informó que la estación Luna-25 se estrelló contra la superficie lunar tras un fallo.
Según la corporación espacial, la sonda se desvió de la trayectoria asignada porque las características fácticas del impulso resultaron diferentes a las programadas.
El sábado, la sonda iba a recibir un impulso para pasar a una órbita previa al alunizaje, pero un imprevisto impidió ejecutar la maniobra acorde a los parámetros especificados.
La primera sonda lunar rusa en casi medio siglo, Luna-25, fue lanzada en la madrugada del 11 de agosto desde el cosmódromo de Vostochni, en el Lejano Oriente de Rusia.
El cohete Soyuz-2.1b colocó la sonda robótica en una trayectoria de acercamiento a la Luna y estaba previsto que, tras pasar de una órbita a otra durante varios días, el aparato se posara cerca del polo sur de la Luna e iniciara una misión de investigación que se habría prolongado por un año.
En 2027, Rusia planea realizar el lanzamiento del orbitador Luna-26; para 2028 se prevé la misión de la sonda Luna-27 y para 2030, la del módulo Luna-28. (Sputnik)