Sochi (Rusia), 4 sep (Sputnik).- Rusia está dispuesta a reanudar la Iniciativa de Granos del Mar Negro, y lo hará tan pronto como se cumplan todos los acuerdos alcanzados en el marco del pacto, declaró este lunes el presidente ruso, Vladímir Putin.
«Me gustaría reafirmar nuestra posición de principio, estamos dispuestos a estudiar la posibilidad de reanimar el acuerdo de granos (…) Y lo haremos tan pronto como se cumplan completamente todos los convenios registrados en él», dijo Putin tras las conversaciones con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, celebradas en la ciudad rusa de Sochi.
Según el mandatario ruso, Moscú, a pesar de todos los obstáculos creados, tiene la intención de continuar exportando alimentos y fertilizantes, así como ayudar a estabilizar los precios y mejorar la situación en la industria agrícola mundial.
«Con este fin, en particular, seguimos organizando el suministro de un millón de toneladas de grano de Rusia a un precio atractivo, para que sea procesado en Turquía y luego sea transportado gratis a los países más pobres. En este sentido, contamos con la ayuda de Catar, que por razones humanitarias está dispuesto a apoyar a los países más pobres», indicó.
Putin recordó que inicialmente Rusia decidió participar en el acuerdo de granos a cambio del cumplimiento de una serie de obligaciones de interés de la parte rusa, «con la mediación del presidente turco y la ONU», pero los compromisos con Moscú «no se cumplieron», y el pacto «llegó a su fin».
El 22 de julio de 2022, Rusia, Turquía y las Naciones Unidas firmaron un acuerdo para desbloquear la exportación de granos y fertilizantes de Ucrania a través del mar Negro, mientras que el Gobierno ucraniano suscribió un documento similar con Ankara y representantes de la ONU.
Desde entonces el acuerdo fue prorrogado en tres ocasiones, la última vez el pasado 17 de mayo, por dos meses.
Rusia formuló cinco requisitos para extender el pacto alimentario: reconectar su banco agrícola, Rosselkhozbank, al sistema SWIFT; reanudar envíos de maquinaria agrícola, repuestos y mantenimiento; levantar la prohibición de acceso a los puertos; reactivar el ducto de amoníaco Togliatti-Odesa; así como desbloquear los activos y cuentas extranjeras de las empresas rusas relacionadas con la producción y transporte de alimentos y fertilizantes.
A falta de avances en esta materia, el Kremlin anunció el 17 de julio que Rusia suspendía su participación en el acuerdo, pero estaría dispuesta a retomarla en cuanto se cumplan sus condiciones.
Desde el 20 de julio, Rusia considera como objetivos militares los barcos que navegan en el mar Negro hacia puertos ucranianos, y como partes del conflicto a los respectivos países.
Ucrania emitió una advertencia similar en relación con los puertos rusos en la cuenca del mar Negro, con efecto desde el 21 de julio. (Sputnik)
Les salió respondón el oso siberiano. Si cientos de castigos y sanciones no han tenido el efecto deseado a pesar de ser impuestas a los rusos y según parece a los chinos también, Putin se da el tono en exigir a estas alturas esos 5 requisitos, nos demuestra cómo va el partido. Los bumerangs regresan desde donde se arrojan. Según parece, a los occidentales se les olvidó quien es quien en tales juegos ajedreícos, que hasta una hipotética inteligencia artificial podría estar detrás de ellos. En fin, estaremos pendientes de las siguientes jugadas.