Jartum, 6 sept (Prensa Latina) Entre refugiados que lo abandonaron todo para salvar sus vidas y desplazados por la guerra, el éxodo sudanés abarca hoy a más de 12 millones de personas, ricos y pobres, confundidos en una masa humana desesperanzada.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) circuló hoy un informe según el cual siete millones 100 mil personas viven como desplazadas internas dentro de Sudán de las cuales tres millones 800 mil ocupan esa clasificación desde el inicio del conflicto en ese país.
Desde el pasado 15 de abril el presidente del Consejo Soberano de Transición (CST), general Abdel Fattah al Burhan, y su aliado de la víspera devenido némesis, el general Mohamed Hamdan Dagalo, jefe de la milicia Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, en inglés) luchan por hacerse con el poder en este país africano.
Los teatros de operaciones de la guerra que libran ambos hombres son las ciudades, incluida esta capital, donde las casas sirven de refugio a los beligerantes, que en sus combates utilizan blindados, bombardeos artilleros y aéreos y denso fuego de fusilería.
El informe de la OIM cifran en un millón 100 mil el número de personas que lograron cruzar las fronteras hacia Egipto, Libia Chad, República Centroafricana, Sudán del Sur y Etiopía, una suerte relativa ya que en varios de esos países existen conflictos de intensidad menor…por el momento.
Sin embargo, y a pesar de su magnitud, la crisis de los refugiados y los desplazados no es el mayor de los problemas en Sudán, ni siquiera el único, ya que el mismo reporte cifra en 24 millones 700 mil las personas que en ese país necesitan ayuda humanitaria urgente para las cuales escasean los recursos.
