Santiago de Chile, 23 sep (Prensa Latina) Repudio provocan hoy en Chile las declaraciones del expresidente Sebastián Piñera, quien en una visita a Argentina dijo haber sufrido un golpe de Estado no tradicional durante el estallido social de 2019.
“Quiere dar cátedra de no violencia y jugar al empate cuando fue él quien eligió el camino de la violencia estatal”, denunció el diputado Hernán Palma, y advirtió que el exmandatario debe responder por las flagrantes violaciones a los derechos humanos durante su gobierno (2018-2022)
El legislador aseguró que Piñera es el único responsable de haber mandado a disparar contra una multitud y dejar a más de 460 jóvenes con daños oculares o sin visión permanente, como es el caso de la hoy senadora Fabiola Campillai y el estudiante Gustavo Gatica.
El 18 de octubre de 2019 comenzó en esta capital un movimiento, impulsado por estudiantes, contra el alza de la tarifa del metro, que posteriormente se extendió por el país y demostró el descontento de la población con las desigualdades sociales y el modelo neoliberal.
Las protestas fueron violentamente reprimidas por los carabineros y las Fuerzas Armadas, con saldo de cerca de 30 víctimas mortales y miles de heridos producto del disparo de perdigones o bombas lacrimógenas.
El “demócrata” Piñera, causante de decenas de muertos, más de 400 traumas oculares, se declara víctima de un golpe de Estado, denunció la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Carmen Hertz, en un mensaje publicado en su cuenta de X.
Afirmó Hertz que Piñera, como goza de impunidad judicial y política, se permite cualquier cosa y consideró que debería activarse la causa en su contra ante la Corte Penal Internacional.
“Evidentemente, no estoy de acuerdo con las declaraciones del exmandatario”, expresó, por su parte, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, y añadió que Chile sabe muy bien lo que es un golpe de Estado, porque acaban de pasar 50 años del quebrantamiento de la democracia.
Interrogado sobre el tema durante una visita de trabajo en Estados Unidos, el presidente chileno, Gabriel Boric, consideró importante no confundir y poner en el mismo saco actos violentos con movilizaciones sociales.
Hay quienes en Chile parecieran olvidarse también de que hay causas legítimas del malestar y esas causas debemos enfrentarlas como país, dijo.
