Moscú, 25 sep (Sputnik).- El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, busca endosar a Moscú la culpa de sus fracasos en la política interior y exterior, declaró este lunes el Ministerio de Exteriores ruso.
«Hay un intento de eximirse de responsabilidad por los fallos en la política interior y exterior, echando la culpa a Moscú», indica el comunicado.
La Cancillería destacó que el discurso de Pashinián del pasado domingo sobre la independencia «contiene ataques inaceptables contra Rusia y no puede dejar de provocar más que rechazo».
Además, la entidad señaló que las últimas declaraciones del primer ministro armenio confirman las conclusiones rusas de que los «destructivos» procesos para Rusia y sus relaciones, «inspirados por Occidente e impulsados por Ereván», «no son de naturaleza episódica, sino sistémica».
«De hecho, el jefe de Gobierno admitió que durante todo este tiempo se estaba preparando deliberadamente a la república para alejarse de Rusia», subrayó.
El ministerio afirmó que las medidas de Pashinián, «diseñadas para establecer un nuevo vector –occidental– para el desarrollo de Armenia, no están justificadas de manera convincente por los supuestos errores por parte de Rusia y la OTSC (Organización del Tratado de Seguridad Colectiva)».
Al mismo tiempo, aseguró que ambos Estados «tienen intereses en gran medida similares en materia de seguridad y desarrollo», y advirtió que «Estados Unidos y otros países de la OTAN (la Organización del Tratado del Atlántico Norte) se han fijado como objetivo no sólo infligir daño estratégico a Rusia, sino también desestabilizar (…) el espacio euroasiático».
«Rusia siempre fue fiel a sus obligaciones aliadas, respetó la condición del Estado armenio y nunca planteó a la república una elección: con nosotros o contra nosotros. Moscú proporcionó y continúa brindando asistencia en gran escala a su hermano Armenia en las áreas de seguridad, economía y cultura», enfatizó.
La Cancillería recordó que en el otoño boreal de 2020, los esfuerzos de Rusia permitieron evitar la derrota total de Armenia y «si Pashinián hubiera aceptado una tregua semanas antes, la pérdida habría sido menos grave».
Por último, recalcó que «la desinteresada actividad de las fuerzas de paz rusas en Nagorno Karabaj, a veces a costa de sus propias vidas, es una confirmación directa del continuo compromiso de Rusia de cumplir su extremadamente difícil misión en aras de lograr la paz entre Azerbaiyán y Armenia».
«Estamos convencidos de que los dirigentes de Ereván están cometiendo un gran error al intentar deliberadamente destruir los vínculos multifacéticos y centenarios entre Armenia y Rusia y convertir al país en rehén de los juegos geopolíticos de Occidente. Estamos seguros de que la inmensa mayoría de la población armenia es consciente de ello», agregó.
Rusia emplazó, por acuerdo entre las partes, un contingente de paz tras el enfrentamiento entre Azerbaiyán y Armenia el 23 de septiembre de 2020 en Nagorno Karabaj, de población mayoritariamente armenia, foco de conflicto desde que decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
La más reciente espiral de tensión en Nagorno Karabaj costó la vida a un número aún indeterminado de personas, entre ellas, seis miembros de las fuerzas de paz rusas presentes en la región. (Sputnik)
