Riad, 28 Oct. (EUROPA PRESS) – El Ministerio de Asuntos Exteriores de Arabia Saudí ha declarado este sábado su condena sin paliativos hacia «cualquier operación terrestre israelí» que tenga lugar en la Franja de Gaza, tras las incursiones nocturnas de los últimos días y en perspectivas de una entrada a gran escala.
«El Reino condena y denuncia las operaciones por tierra que está llevando a cabo el Ejército israelí en la Franja de Gaza y avisa del peligro que representan estas violaciones flagrantes e injustificadas del derecho Internacional contra nuestros hermanos palestinos», hace saber el Ministerio en un comunicado.
Así, «el Reino pide a la comunidad internacional que asuma sus responsabilidades para detener inmediatamente esta operación militar, de conformidad con la resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas emitida el 27 de octubre de 2023», con el objetivo de «ahorrarse la sangre de personas inocentes, respetar el derecho internacional humanitario y permitir a las organizaciones humanitarias y de socorro entregar ayuda humanitaria urgente y necesaria a los civiles en la Franja de Gaza».
El comunicado tiene lugar en medio de un intenso día de conversaciones del ministro de Exteriores saudí, Faisal bin Farhan, con sus homólogos de Egipto, Samé Sukri; Marruecos, Naser Bourita, y Jordania, Ayman Safadi, con quien ha coincidido en la necesidad imperiosa de proteger a los civiles de Gaza y garantizar la entrada constante de ayuda humanitaria.
La guerra entre Hamás e Israel tiene lugar en un momento en que los gobiernos israelí y saudí estaban acercando posturas para un histórico acuerdo de normalización en sus relaciones bilaterales.
De hecho, el presidente estadounidense, Joe Biden, ha llegado a relacionar el ataque del 7 de octubre de Hamás contra el sur de Israel como una consecuencia de este acercamiento.
Sin embargo, el resurgimiento del interés de los saudíes por la causa palestina podría ejercer una creciente presión sobre Israel a la hora de decidir qué soluciones políticas poner sobre la mesa una vez finalice la guerra y podría llevar al país a hacer concesiones para una fructífera normalización de relaciones con Arabia Saudí.
