Asunción, 15 nov (Prensa Latina) Las crisis políticas, económicas y sociales paraguayas generadas por los propios correligionarios del presidente Santiago Peña del gobernante Partido Colorado prevalecen luego de transcurridos tres meses de gestión, aseguró hoy el periódico Últimas Noticias.
Las políticas fueron las más escandalosas entre ellas durante estos tres primeros meses iniciados el 15 de agosto, aunque el mandatario logró subsanar algunas grietas generadas con el Legislativo, pero sin ocultarlas, al punto de admitir que fue chantajeado por los parlamentarios en la gestión del presupuesto general, señaló el diario.
Peña incumplió en general los cambios significativos -alega el periódico- prometidos para sus primeros 100 días de poder, pese a que asumió respaldado con todas las ventajas políticas para la gobernabilidad y para que las acciones y proyectos fluyeran sin resistencia.
Últimas Noticias recordó que el flamante presidente cuenta con mayoría de apoyo oficial en todo el territorio nacional, incluso en el Congreso, las gobernaciones e intendencias, y con el poder para disponer de recursos.
“Peña, un presidente desarrollista –argumenta la publicación- centró sus promesas de gobierno en acciones para el bienestar inmediato”, pero estas quedaron incompletas, sobre todo las del programa de viviendas para la clase media, que fijaba la construcción de 500 mil soluciones habitacionales.
Tampoco logró el mandatario la prometida creación de 500 mil empleos, la reducción de precios del combustible y el fortalecimiento del Grupo Lince, creado durante el gobierno de Horacio Cartes (2013-2018) para reforzar la acción policial preventiva y brindar seguridad a la ciudadanía.
La reducción de las tarifas de los carburantes duró solo unos días, pues las estaciones privadas las aumentaron y las de la estatal Petróleos Paraguayos esperaron hasta octubre y aún están en negociación.
Las promesas de seguridad –alega el diario- carecieron de notoriedad hasta ahora, en un país donde aumentan los asaltos y robos, mientras una de las más fuertes crisis del gobierno son las bandas criminales que dominan las cárceles, sobre todo en la capitalina Tacumbú con el clan criminal Rotela y su control casi total de las instalaciones.
Otro revés para el jefe de Estado durante sus tres meses de Gobierno fue la promesa de derogar el convenio con la Unión Europea de ayuda a las reformas educacionales, usada por Peña como bandera de campaña y sin concretarse aún, añade el diario Última Hora.
Santiago Peña ganó con el 42,7 por ciento de los votos las elecciones del 30 de abril y asumió la Presidencia el 15 de agosto.
