San José, 30 dic (Prensa Latina) El antaño problema del acceso a la atención sanitaria pública, y una criminalidad sin precedentes heredan los costarricenses en 2024, además del alza de precios en la canasta básica y combustibles, por solo mencionar algunas situaciones.
Acceder a cualquier servicio de salud, desde una cita de consulta externa hasta una intervención quirúrgica es un verdadero problema en Costa Rica, con listas de espera que duran de meses a años.
Según cifras oficiales, un grupo de 280 mil 621 pacientes necesitan acceder a una consulta externa y deben esperar 375 días, mientras 177 mil 21 personas requieren una intervención quirúrgica y el tiempo se prolongará 461días.
A juicio de analistas, las listas siempre existirán, lo grave es que se salgan de control como sucede con la Caja Costarricense de Seguridad Social (CCSS), institución que provee de salud a gran parte de la población.
Consideran que existen varias razones para que esto suceda: desde el envejecimiento poblacional, el incremento de las enfermedades crónicas, insuficiencias en el modelo de gestión del sistema, en la infraestructura, hasta la deuda del gobierno con la CCSS, por solo mencionar algunas.
De hecho, este último aspecto ha suscitado grandes conflictos en los últimos años, y discrepancias entre ejecutivos de la CCSS y el Gobierno.
Ejecutivos de la CCSS presentaron en noviembre último la denominada Ruta de la Salud, que lleva el lema Menos espera, mejores servicios para que a finales del 2024 ninguna persona quede pendiente por la atención de las listas del 2017 al 2021.
Al presentar la propuesta explicaron que buscan que al finalizar el 2024 los pacientes con enfermedades de alta complejidad no deben esperar más de 120 días por la atención y los pacientes de cirugías de baja complejidad esperen máximo un año por el procedimiento que necesitan.
Además, la estrategia busca que, para finales del 2025 ningún paciente, de ninguna patología, espere más de un año para una atención
De todas formas, las organizaciones sindicales coinciden en que esta iniciativa es una improvisación y una clara evidencia de las intenciones privatizadoras de los servicios de salud.
Otro tema que inquieta a los costarricenses es la inseguridad, acentuada con fuerza en el año que concluye.
Hace solo unos días, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica dio a conocer que el país alcanzó la cifra de 900 homicidios, vaticinio de la entidad para este año, ante la situación de criminalidad desde hace ya algún tiempo.
La ola de homicidios que Costa Rica experimenta es causada entre otros aspectos por el narcotráfico, el ajuste de cuentas, el control de localidades y la legitimación de capitales, según argumentan las autoridades
Cómo enfrentar el fenómeno desata encontronazos entre el Ejecutivo y el Congreso y el OIJ, entonces, reclama más presupuesto para lograrlo.
Ante el panorama, hace solo unos días una nueva comisión con representantes de los poderes del Estado comenzó sus funciones con el objetivo de analizar todos los proyectos de ley en materia de seguridad y generar documentos idóneos para que puedan ser discutidos en el Congreso y lograr su aplicación.
Mientras, el OIJ sigue adelante para poner freno a la situación y desde hace algún tiempo se producen operativos para desarticular bandas dedicadas al crimen organizado.
