San Salvador, 20 ene (Prensa Latina) La sanción para funcionarios salvadoreños que inauguren obras en campaña sería la destitución del cargo, reiteró hoy el magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Julio Olivo.
Citado por Radio Ysuca, el letrado reaccionó a los resultados que arrojan tres encuestas presentadas durante la semana y que indican que la población confía poco o nada en la máxima autoridad electoral de El Salvador.
La inauguración de obras en las últimas semanas donde están presentes funcionarios del gobierno y parlamentarios del partido Nuevas Ideas (NI) se convirtió en un asunto espinoso dado que la ley prohíbe la propaganda electoral.
Según la ley, está prohibido publicar en medios de comunicación privados o estatales cualquier contratación, inauguración de obras públicas o que proyecten realizar, algo muy frecuente en las últimas semanas en la televisión y medios de prensa digital e impresa.
El magistrado dijo que habría que analizar “varios vacíos que se están dejando, por parte de la autoridad electoral”.
Entre estos mencionó la ausencia del TSE controlando la campaña electoral y la deuda existente respecto al control del financiamiento de los partidos políticos.
Olivo apuntó que el TSE debe de actuar ante las acciones que realizan algunos funcionarios actuales que se dedican a inaugurar obras en plena campaña.
El 17 de enero pasado, el Tribunal publicó en redes sociales un comunicado en el que recordaba que, de acuerdo al artículo 178 del Código Electoral, a partir del 5 de enero está prohibido inaugurar o publicitar obras estatales.
Al respecto, la emisora denunció acciones que se desarrollan desde el Destacamento Militar número 7 de Ahuachapán, donde policías y militares custodian la zona, mientras camiones y pickups entran y salen del recinto militar.
Algunos aún llevan cajas de cartón color azul con el logo de la Presidencia de la República. En la parte inferior se lee: Programa Presidencial de Apoyo Alimentario, PPAA.
Se trata, apuntó el informe, de la repartición masiva de alimentos que inició en cantones y caseríos de los departamentos de Chalatenango y Ahuachapán, y que se pretende ampliar en más zonas del país.
Pese a ser un amplio programa de entrega de alimentos, el Gobierno de El Salvador guarda silencio y en las redes sociales el presidente y candidato, Nayib Bukele no anunció la ayuda gubernamental, pese a que esto pudiera estar incluido en la prohibición electoral.
Personal contratado para el programa que conversó con YSUCA aseguran que está prohibido que gente de Nuevas Ideas, candidatos a diputados o alcaldes participen en la entrega. Sin embargo, identificaron a algunos simpatizantes de Nuevas ideas, incluso directivos del partido en Chalatenango, como parte de los guías que participan de la repartición.
