Acompañado por la vicemandataria Karin Herrera y el líder del Congreso, Nery Ramos, el jefe de Estado expresó gratitud a nombre del pueblo por “el servicio desinteresado, y optimismo por el futuro y la seguridad democrática que están ayudando a construir”.
En la capitalina Brigada Militar Mariscal Zavala, la unidad militar más antigua del Ejército, Arévalo describió que la identidad nacional tiene su origen también en la fundación de la Fuerza de Tierra.
“Las botas sobre el terreno son el factor determinante en la defensa de un territorio”, acotó el político, académico y sociólogo de profesión.
El jefe del Estado Mayor, General de Brigada Carlos Antonio Medina, detalló que las Fuerzas de Tierra están conformadas por unidades de combate y apoyo en el país.
Protegen –enfatizó- las zonas fronterizas, da apoyo en las unidades de paz y en eventos de atención de la población cuando es afectada por fenómenos naturales.
Las Fuerzas de Tierra interactúan con los guatemaltecos por eso, subrayó, y reafirmó el compromiso para proteger toda la ciudadanía.
Refirió la búsqueda de la modernización del armamento, equipo técnico y personal de las fuerzas castrenses y adelantó que impulsarán la equidad de género en el Ejército.
Este territorio centroamericano conmemora 173 años de la Batalla de La Arada, cerca de la ciudad de Chiquimula, donde se obtuvo la primera victoria de las Fuerzas de Tierra contra aliados de Honduras y El Salvador.
Formó parte de la guerra entre el gobierno conservador de Guatemala y la coalición liberal de esas dos naciones vecinas, la amenaza más fuerte –según historiadores- para la soberanía como República.
