Washington, 7 mar (Sputnik).- La defensa del expresidente hondureño Juan Orlando Hernández (2014-2022) dijo el miércoles en el alegato final durante el juicio en su contra en EEUU por contrabando de armas y drogas, que el exmandatario siempre combatió a los narcotraficantes.
«Nadie puede decirles cómo votar en este veredicto (…) No tienen que aceptar todo lo que dice EEUU. Les pedimos un veredicto de inocente de todos los cargos (…) Ustedes escucharon al señor Hernández (…) Él ha luchado contra ellos (los narcotraficantes) por años. Todos los grandes contrabandistas de drogas en Honduras están en la cárcel», dijo el abogado Renato Stabile al jurado.
Añadió que la fiscalía del Distrito Sur de Nueva York (este) no tiene pruebas contundentes y que los testigos tenían intereses propios al declarar contra el exmandatario.
El abogado subrayó que los narcotraficantes se entregaron a EEUU porque sabían que el exmandatario iba tras ellos y por eso quieren que la justicia del país norteamericano lo condene.
Por su parte, la fiscal Elinor Tarlow dijo en la refutación de EEUU que el exmandatario combatió a sus enemigos y no a los narcotraficantes.
«Los argumentos de la defensa no tienen sentido. Dicen que Hernández trato de luchar contra el narcotráfico. Era el presidente, ¿piensan que va a decir que está a favor del narcotráfico? Necesitaba que se viera como que lo estaba intentando» combatir, afirmó la fiscal.
Añadió que el expresidente «no fue duro con el crimen, fue duro con sus enemigos».
«Por años explotó el sistema político para el tráfico de drogas. Usó al Ejército y la policía y su propio poder. Es momento que ustedes den un veredicto de culpabilidad», concluyó.
Desde un inicio la defensa de Hernández atacó la credibilidad de los testigos de la Fiscalía, en su mayoría reos que declararon a cambio de beneficios judiciales, como los narcotraficantes Alex Ardón, Fabio Lobo o Lionel Riviera Madariaga, o el exjefe policial Mario Guillermo Mejías, quien confesó haber mandado a asesinar al fiscal Orlan Chávez.
En su alegato final, la fiscalía había afirmado que el expresidente extraditó a los narcotraficantes para salvarse.
El jurado deliberará este jueves sobre el caso tras recibir las instrucciones por parte del juez Kevin Castle.
Extraditado a EEUU a pocos días de dejar la presidencia, en abril de 2022, el expresidente enfrenta cargos federales por los delitos de conspiración para narcotráfico, tráfico y posesión de armas, y si es hallado culpable podría ser condenado a pasar el resto de su vida en prisión. (Sputnik)
