Caracas, 30 mar (Prensa Latina) El cierre de postulaciones a candidato a presidente para las elecciones del 28 de julio inició una semana, que cierra hoy, caracterizada por ataques políticos y mediáticos contra Venezuela, donde hubo también reencuentro con la fe.
La ultraderecha nacional, Estados Unidos y sus aliados, con el apoyo de las redes sociales y la prensa, montaron una matriz de que el Gobierno imposibilitó la inscripción de algunos candidatos de partidos de derecha ante el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Una vez más salió a relucir el dicho que “la mentira tiene las patas cortas” y las falsas acusaciones se fueron desmontando, poco a poco, pero la “fake news” hizo su daño y sobre la República Bolivariana pesa ahora una guerra mediática que, para algunos expertos, es solo el preludió.
Se ha dicho y explicado por analistas y autoridades que lo ocurrido nada tiene que ver con decisiones del Ejecutivo, sino con el proceder interno de desconfianza e intereses de poder de las oposiciones entre sí, y el actuar confuso e intencional del partido que llaman fascista, Vente Venezuela.
Esta organización política, cuya líder es la inhabilitada por 15 años María Corina Machado, no está registrada ante el CNE e hizo poco, o nada, para cumplir con los artículos 27, 47 y 52 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales, la cual regula y desarrolla los principios constitucionales y derechos de participación política de los ciudadanos.
También establece todas las competencias referidas a los procesos electorales atribuidas por la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y la ley, al Poder Electoral.
De acuerdo con los análisis y evidencias mostradas en las últimas horas por el medio digital La Iguana TV, Machado no recibió el apoyo de los partidos Fuerza Vecinal, Un Nuevo tiempo y la denominada Mesa de la Unidad Democrática, por la presunción de designar a dedo a su presumible sustituta Corina Yoris.
Yoris fue presentada por María Corina ante la prensa apenas 48 horas antes de cerrar el proceso de inscripción de postulaciones, lo cual, al parecer, no cayó nada bien “en sus aliados”, que sí presentaron casi al cierre ante el CNE a sus pretendientes Manuel Rosales y el llamado “candidato tapa”, Edmundo González, respectivamente.
La misma Corina, en declaraciones a un medio de prensa colombiano, calificó este hecho como traición de Judas, mientras en un video mostrado, Rosales y su equipo de campaña festejaban su candidatura pasada la medianoche del 25 de marzo, cierre de postulaciones.
En medio de tanta mentira repetida, determinados gobiernos de la región, organizaciones mundiales y regionales, personalidades políticas, a algunos de los cuales el presidente Nicolás Maduro llamó “izquierda cobarde”, pusieron en tela de juicio la legitimidad del proceso electoral y del sistema político.
El titular del CNE, Elvis Amoroso, expuso los datos finales del cierre de postulaciones con la inscripción de 13 candidatos amparados por 37 organizaciones políticas, que las autoridades consideraron como la más variopinta y representativa de la democracia venezolana.
Amoroso afirmó que participaron todos los partidos políticos autorizados por el Poder Electoral que cumplieron los requisitos establecidos en la Constitución nacional y las leyes electorales.
Del total de postulados inscritos, 12 representan el amplio espectro de las oposiciones en Venezuela, lo cual significa que el 92 por ciento de los candidatos representan a ese sector, mientras uno, Nicolás Maduro, personifica al oficialismo, por el cual apostaron 11 partidos agrupados en el Gran Polo Patriótico.
Otro dato interesante es que de las 37 fuerzas políticas que intervendrán en los comicios, el número 31 en 25 años de Revolución bolivariana, 26 son de derecha, es decir, el 70 por ciento de todos los registrados ante el Consejo Nacional Electoral.
Entre los desmentidos a los ataques contra Venezuela, el Partido Socialista Unido expresó en un comunicado su condena a lo que llamó “relatos malintencionados y mentirosos” fabricados en las últimas horas por los laboratorios comunicacionales.
La organización política denunció que el relato fabricado, “lleno de artimañas”, cumple con el propósito de impedir el desarrollo del cronograma electoral, alterar la paz nacional y confundir sobre los verdaderos acontecimientos que, motivados por la arrogancia, “buscan torpedear las elecciones presidenciales y generar un clima de violencia nacional”.
En medio de estos acontecimientos, el pueblo venezolano disfrutó y sigue celebrando la Semana Santa en templos religiosos y lugares de distracción habilitados para el reencuentro con la fe y la diversión, custodiados por más de 100 mil agentes de seguridad.
