Viena, 1 abr (Sputnik).- La agresividad de la Alianza Atlántica hacia Rusia arruinará por completo la situación en Europa, advirtió en declaraciones a Sputnik el jefe de la delegación rusa en las negociaciones en Viena sobre la seguridad militar y el control de armas, Konstantín Gavrílov.
El diplomático subrayó que «esto no puede continuar por mucho tiempo».
«Una política agresiva hasta el límite hacia nuestro país conducirá a una degradación total de la situación político-militar en Europa», dijo Gavrílov en una entrevista concedida con ocasión del 75 aniversario del Tratado del Atlántico Norte.
El documento constitutivo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) fue firmado en Washington el 4 de abril de 1949.
En opinión de Gavrílov, Rusia se opone hoy a «un conglomerado industrial-militar de la OTAN y Ucrania, en el que esta última hace de campo de batalla e instrumento de lucha armada contra Rusia, mientras que los países de Occidente ejercen las funciones de puesto de mando, retaguardia, provisión de armas e inteligencia, así como asignación de objetivos».
La hostilidad hacia Rusia, según el diplomático, prevalece hoy en todo el bloque y se ve reflejada tanto en la planificación militar como en la militarización de los países miembro.
El interlocutor de Sputnik afirmó que Rusia está preparada para el creciente involucramiento de la Alianza Atlántica en el conflicto de Ucrania.
«Estrategas militares en Washington y Bruselas deberían asumirlo: si lo que intentan es ponernos a prueba con el levantamiento del tabú sobre un posible envío de militares profesionales de la Alianza a Ucrania, estamos preparados para cualquier desarrollo de los acontecimientos», aseguró Gavrílov.
El diplomático recordó las palabras del presidente ruso, Vladímir Putin, de que no habrá ningunas líneas rojas para Rusia en relación con los países que afirman no tenerlas con respecto a ella.
«Hemos advertido en reiteradas ocasiones de que su creciente involucramiento en el conflicto armado implica el riesgo de una confrontación militar directa entre potencias nucleares, y la responsabilidad por las consecuencias catastróficas recaería en ellos», dijo Gavrílov.
Es involucramiento, agregó, «contraviene la declaración conjunta del 3 de enero de 2022, a la que Rusia se mantiene fiel sin duda, sobre la necesidad de evitar una guerra nuclear». (Sputnik)
