Ginebra (Suiza), 5 abr (Sputnik).- La resolución del Consejo de Derechos Humanos de la ONU que condena a Israel por violaciones del derecho internacional arroja una sombra sobre la entera organización internacional, declaró este viernes la representante permanente israelí en la ONU en Ginebra, Meirav Eilon Shahar.
La mayoría de los miembros del Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobaron este viernes una resolución que pide poner fin a la venta de armas y artículos de doble uso a Israel.
«Todo lo que le importa a este Consejo y a muchos de sus miembros es condenar a Israel, criticar al único Estado judío y defender al (movimiento palestino) Hamás, a la Autoridad (Nacional) Palestina y a todos aquellos que buscan destruir nuestro país. Esta resolución arroja una sombra sobre el Consejo de DDHH y sobre la ONU en general», dijo la diplomática.
Respondiendo a una pregunta de Sputnik, Eilon Shahar indicó que Israel no cooperará con la comisión de investigación de la ONU o la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (Acnudh), como lo exige la resolución, ya que estos mecanismos «no son imparciales».
«Los miembros de la comisión de investigación de la ONU no fueron elegidos por su competencia e imparcialidad, sino por sus obvias posiciones antiisraelíes antes de su nombramiento», expresó su convicción la representante permanente.
Eilon Shahar aseguró que estaba decepcionada por el hecho de que países europeos como Bélgica, Finlandia y Luxemburgo apoyaran una resolución que no menciona a Hamás.
De los 47 Estados miembros del Consejo de DDHH de la ONU, 28 apoyaron la resolución, 13 se opusieron y seis se abstuvieron.
El documento aprobado también pide a Israel que ponga fin a su ocupación de la ribera occidental y Jerusalén Oriental, no inicie una operación militar contra la ciudad de Rafah, ubicada en el sur de la Franja de Gaza, y levante el bloqueo del enclave palestino.
Los autores de la resolución subrayan que «las críticas a las violaciones del derecho internacional por parte de Israel no deben equipararse con el antisemitismo».
A principios de marzo, la relatora especial de la ONU sobre los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados, Francesca Albanez, advirtió que actualmente es demasiado pronto para decir si los Estados que suministran armas a Israel son cómplices del crimen de genocidio.
El pasado 7 de octubre, un ataque coordinado por Hamás contra más de 20 comunidades israelíes resultó en aproximadamente 1.200 fallecidos, alrededor de 5.500 heridos, y la captura de 253 rehenes, de los cuales cerca de 100 fueron posteriormente liberados en intercambios de prisioneros.
En represalia, Israel lanzó una declaración de guerra contra Hamás y emprendió una serie de bombardeos sobre Gaza, que han dejado hasta el momento unos 33.100 palestinos muertos y casi 75.800 heridos.
Rusia y otros países instan a Israel y Hamás a pactar un alto el fuego y abogan por una solución de dos Estados, aprobada por la ONU en 1947, como la única vía posible para lograr una paz duradera en la región.
El 25 de marzo, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas exigió con 14 votos a favor y la abstención de Estados Unidos un alto al fuego inmediato para el conflicto en Gaza durante el mes sagrado de Ramadán, además de la liberación inmediata de todos los rehenes. (Sputnik)
Israel se ventila la boca hablando de sombras de la ONU, cuando la realidad es el generalizado repudio mundial del terrorismo israelí por genocidio, crímenes de guerra y DDHH los cuales han pisoteado, alegando que quieren eliminar su país. Más bien pareciese que la idea sionista es exterminar cientos de millones en el mundo, como lo hacen con los indefensos palestinos, donde van sistemáticamente extendiendo los conflictos y belicismo a incalculables proyecciones. Y tan responsables son esas gentes como quienes surten por millones armamentos y logística. Utilizar a sus jóvenes paisanos, como los ucranianos, taiwaneses, coreanos, japonés, etc., es la carne de cañón para evitar que los estadounidenses sean masacrados, pero sí arrinconarlos por la situación socio-económica que viven decenas de millones por el hambre, miseria, desempleo, drogadicción, salud, vivienda, etc., a lo interno de la USA. Existen miles de millones para la guerra, y una indigencia para sí mismos. Sionistas ricachones, estamos hartos de su usual y trillado discurso.