México, 24 abr (Xinhua) — El enfoque estadounidense hacia China se basa en «una mezcla de arrogancia, bajeza e ingenuidad», consideró el economista y profesor universitario estadounidense Jeffrey Sachs, en un artículo publicado esta semana en el diario mexicano «La Jornada».
«La arrogancia proclama que Estados Unidos manda un mensaje al mundo, así que ¡cómo se atreve China a tener tal éxito económico! La bajeza consiste en que Estados Unidos se dedica abiertamente a bloquear el progreso chino», indicó Sachs, quien ha sido asesor de tres secretarios generales de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La ingenuidad de Estados Unidos, continuó el especialista, radica en creer que el resto del mundo en realidad secundará la propaganda estadounidense.
«La parte de la bajeza de la estrategia estadounidense deriva de su equivocado intento de tener la hegemonía global. Su objetivo es detener, si no descarrilar el éxito económico chino», sostuvo Sachs.
Entre las tácticas que ha llevado a cabo Estados Unidos, de acuerdo con el economista, figuran la de tratar de cortar a China de los acuerdos comerciales; tratar de excluirla de bienes de alta tecnología, como los semiconductores avanzados; rodearla militarmente en los confines de Asia, y forjar nuevas alianzas militares en el continente asiático.
«Estados Unidos ha cerrado en parte sus mercados a los productos de China y quiere que Europa haga lo mismo, puesto que la capacidad productiva del país asiático sigue creciendo», puntualizó.
Ante este panorama, el también director de la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, afirmó que EE. UU. debe cooperar con China, no combatirla, cuando se trata de desarrollo global sustentable.
«En tanto Estados Unidos se ha aferrado a continuar expandiendo la producción de combustibles fósiles, verdadero callejón sin salida en un mundo que necesita descarbonizarse para mediados de este siglo, China se ha estado preparando para la energía cero carbono», declaró.
Por lo tanto, subrayó el investigador, China encabeza al mundo en tecnología solar, eólica, nuclear de cuarta generación, de vehículos eléctricos y muchas otras.
Además, la iniciativa de la Franja y la Ruta es una «política sumamente innovadora e importante para promover el desarrollo sustentable en las economías emergentes», agregó Sachs.
En distintas ocasiones, Beijing ha mostrado buena voluntad hacia Washington y disposición a ser un socio y amigo.
Sin embargo, las relaciones bilaterales han enfrentado dificultades notables en los últimos años, debido a que algunas personas en EE. UU. perciben a China como «su competidor más serio».
