Ciudad de Panamá, 3 ene (Prensa Latina) Trabajadores panameños denunciaron hoy atropellos que sufre la población en una intervención especial ante los 71 diputados de la Asamblea Nacional (parlamento), en el inicio del cuarto período de sesiones ordinarias.
A nombre de la alianza Pueblo Unido por la Vida, el secretario general del Sindicato Único Nacional de los Trabajadores de la Industria de la Construcción y sus Similares (Suntracs), Saúl Méndez, indicó ante el plenario que rechazan leyes aprobadas por el legislativo que no resuelven los problemas de las mayorías.
En esta sala, dijo, se mencionó la víspera de transitar hacia un mejor país por nuestro propio camino y es lo que demandamos: el cambio del modelo neoliberal impuesto desde el exterior por el Banco Mundial y Estados Unidos, remarcó.
Para Méndez, el camino propio es impulsar un Plan Nacional de Desarrollo, garantizar vida digna a todos los panameños, que haya estabilidad en los puestos de trabajo y no permitir que las grandes empresas eleven los precios a su conveniencia.
El líder sindical llamó además a renacionalizar las hidroeléctricas y empresas estratégicas del Estado como las telecomunicaciones y rechazar contratos millonarios como el que a espaldas del pueblo se negocia con la compañía Minera Panamá, que solo conducen al saqueo de los recursos naturales.
Méndez cuestionó el discurso la víspera del presidente de la República, Laurentino Cortizo, en su informe de gestión, pero alejado de la realidad de la sociedad, en la que el hambre azota al istmo y demandó a la Asamblea dejar de comportarse neutral ante tantos abusos y fenómenos como la corrupción presente en el Ejecutivo y el Legislativo.
Finalmente en su breve comparecencia recordó que en julio de 2022 el pueblo salió a las calles para ejercer lo que llamó verdadera democracia e impuso su voluntad, el orden y que se adoptaran medidas en beneficio de las mayorías.
También como resultado de esas manifestaciones, agregó, se estableció con el Gobierno una mesa única de diálogo para encontrar medidas perentorias a las crisis social, pero se acordó además una segunda fase para debatir problemas estructurales a la que se oponen los empresarios privados con el apoyo del Gobierno, según denunció.
En la jornada los trabajadores se manifestaron en las inmediaciones de las instalaciones del parlamento. En esa congregación el secretario general de la Confederación Nacional de Unidad Sindical Independiente (Conusi), Marcos Andrade, indicó que comienzan un nuevo año con similares demandas frente al alto costo de la vida.
Andrade rechazó los despidos masivos que fomenta el sector empresarial y deja a padres de familia sin la posibilidad de llevar el sustento a sus hogares, en medio de un mercado laboral donde más del 50 por ciento está signado por la informalidad.
También adelantó que mantendrán la lucha por rescatar la Caja de Seguro Social, en medio de una crisis financiera y estructural y que el Gobierno piensa enmendar con privatizaciones y medidas paramétricas como el aumento de la edad de jubilación, elevar la cuota mensual obrera y la reducción de los beneficios para asegurados y sus familiares.
Mientras, Thaud Ruiz, de la Central Nacional de Trabajadores de Panamá (CNTP) fustigó los discursos públicos presentados la víspera en el parlamento, con cifras macroeconómicas que apuntan a determinado progreso, el cual no llega a las mayorías y se desentiende de la desigualdad y pobreza que vive el país.
