Montevideo, 20 jun (Sputnik).- El presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, anunció el lunes que su Gobierno decretó emergencia hídrica en la zona metropolitana (que comprende Montevideo, Canelones y San José, sur) y que exonerará impuestos para el agua embotellada.
«Acabamos de decretar emergencia hídrica para la zona metropolitana. Estamos exonerando de impuestos al agua embotellada. (…) en virtud de esta exoneración de impuestos suponemos que los precios tienen que bajar. Debería haber una baja sensible. Defensa al consumidor tiene publicado esta cifra. Nosotros vamos a establecer diariamente el precio base para el agua embotellada», afirmó en conferencia de prensa.
La exoneración de impuestos significará una renuncia fiscal de unos 10 millones de dólares, agregó.
Sostuvo que el Ministerio de Salud tendrá que determinar en los próximos días quiénes y hasta qué niveles se puede consumir agua.
Anunció una inversión de 20 millones de dólares para realizar un embalse y una obra de infraestructura con cañería en el río de San José y aseguró que la obra durará un máximo de 30 días.
La sequía que enfrenta el país mantiene secos los principales reservorios y obligó a aumentar la salinidad y los cloruros de la red pública.
La estatal Administración Nacional de las Obras Sanitarias del Estado prevé que a fines de junio o principios de julio Montevideo y su área metropolitana se quedarán sin agua si no se producen precipitaciones de consideración.
La sequía en el dique del Paso Severino, en el departamento de Florida (centro sur), principal abastecedor de esta capital, hace que las reservas estén en crisis, por lo que la empresa tendrá que distribuir agua completamente salada, extraída del Río de la Plata, que técnicamente es un estuario conectado al océano.
En los departamentos de Montevideo y Canelones viven el 60 por ciento de la población de Uruguay. (Sputnik)
