Madrid, 21 Jul. (EUROPA PRESS) – Un equipo de Médicos sin Fronteras (MSF) ha sido apaleado y azotado por un grupo de hombres armados cuando se dirigía este pasado jueves a entregar suministros médicos a un hospital del sur de la capital de Sudán, Jartum, uno de los epicentros del violentísimo conflicto que libran desde el 15 de abril el Ejército sudanés y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).
Según relata la ONG, el equipo, formado por 18 personas, fue interceptado por un grupo de hombres armados a solo 700 metros del Hospital Turco, uno de los dos únicos centros médicos que todavía permanecen abiertos en el sur de la capital.
El equipo fue agredido por hombres armados «que los golpearon y azotaron», y además uno de los conductores «fue detenido y amenazado de muerte antes de ser liberado», según la ONG. Los asaltantes también robaron un vehículo. Médicos sin Fronteras no da más detalles sobre la identidad de los atacantes.
La ONG recuerda que cientos de personas — incluidos niños — para recibir tratamiento vital. Sin ir más lejos, el pasado martes, el hospital recibió a 44 pacientes heridos en un ataque aéreo.
Cada día, el hospital recibe a unos 15 heridos de guerra, realiza cirugías vitales y da tratamiento esencial para pacientes con enfermedades crónicas.
MSF expresa su grave preocupación ante la posibilidad de que, ante incidentes como el del jueves y otros similares que lo han precedido, sea incapaz de mantener su presencia en el Hospital Turco.
