Puerto Príncipe, 24 jul (Prensa Latina) El Colectivo Défenseurs Plus denunció la violencia sistemática de niñas y mujeres perpetradas por las pandillas de Haití, que funciona como un arma en los enfrentamientos ya habituales de esos grupos, se conoció hoy.
La organización que defiende los derechos humanos recordó que los crímenes sexuales están condenados por el derecho haitiano y por el marco jurídico internacional firmado y ratificado por el país caribeño.
El caso más reciente reportado por la plataforma fue la violación en grupo de una menor de 17 años por los miembros de la pandilla Kokorat san ras el 10 de julio.
Défenseurs Plus también se hizo eco de los datos aportados por la organización de defensa de las mujeres Nègès Mawon, según la cual 652 mujeres y niñas fueron víctimas de violencia sexual en cuatro barrios de Puerto Príncipe, entre mayo de 2022 y marzo de este año.
Noventa de las víctimas contrajeron enfermedades de transmisión sexual y nueve fueron asesinadas, lamentó el Colectivo.
Además, denunció que la mayoría de los hospitales y las instituciones públicas que pueden proporcionar asistencia y apoyo psicológico a las vejadas son disfuncionales, con lo cual las mujeres y niñas que sufren esas experiencias traumáticas quedan abandonadas a su suerte.
Están traumatizadas y viven con las secuelas de la violencia bajo un reino de impunidad que fomenta las violaciones sistemáticas de los derechos humanos, deploró la plataforma en un comunicado.
En este sentido, reclamaron a las autoridades actuales adoptar medidas urgentes y necesarias para frenar ese fenómeno “que sume a muchas familias en el dolor y la angustia”.
En una breve visita a esta capital a inicios de julio, el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, condenó la violencia sexual generalizada contra las mujeres y las niñas, utilizada por los grupos armados para instalar el miedo, así como la extrema vulnerabilidad de la población ante pandillas “depredadoras”.
Un informe anterior del organismo mundial denunció en octubre que infantes de apenas 10 años y personas ancianas fueron víctimas de violencia sexual, incluso de violaciones colectivas durante horas ante padres y madres o sus hijos e hijas a manos de más de media docena individuos.
“Los espantosos testimonios compartidos por las víctimas subrayan la necesidad imperiosa de tomar medidas urgentes para detener este comportamiento depravado, garantizar que los responsables rinden cuentas y las víctimas reciban apoyo”, reclamaron en una nota conjunta la Oficina Integrada de la ONU en Haití y el Alto Comisionado para los Derechos Humanos.
