Ciudad de Guatemala, 27 jul (Prensa Latina) El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, mostró hoy profunda preocupación por los intentos de socavar el proceso electoral en Guatemala, divulgan aquí medios de prensa.
Las acciones podrían dar lugar al irrespeto de la voluntad de los votantes, subrayó la autoridad, quien mencionó la compatibilidad de estas con el derecho internacional de los derechos humanos y el Estado de derecho.
Reiteró el llamamiento del Secretario General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, contra cualquier coacción, interferencia arbitraria o ilegal en los procesos de sufragios y las normas electorales.
Türk pidió específicamente garantías para que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y la Oficina del Registro Civil puedan trabajar de forma independiente y libres de cualquier interferencia indebida.
Exigió la integridad del proceso comicial y el respeto a la voluntad de los votantes, tal y como se expresó el 25 de junio pasado, fecha de la primera vuelta.
«Unas elecciones libres y justas y la separación de poderes son fundamentales para mantener el Estado de derecho y constituyen la base de una democracia que protege y promueve los derechos humanos», remarcó.
Las manifestaciones de las últimas semanas han sido pacíficas, pero me preocupan los crecientes niveles de desconfianza y polarización en la sociedad guatemalteca, enfatizó el jefe de Derechos Humanos de la ONU.
Instó además a que las entidades correspondientes sigan garantizando el derecho de las personas a exponer sus quejas.
En esta nación, justo en el momento de confirmación de los resultados de los comicios, instancias del Ministerio Público solicitaron la suspensión del partido movimiento Semilla por supuestas irregularidades en su constitución.
La Corte Constitucional dictaminó provisionalmente que esa fuerza política, calificada de progresista, podía participar en la segunda vuelta; sin embargo, continuaron las arremetidas por parte de la Fiscalía.
El país vivió luego momentos de tensión por la convocatoria a salir a las calles en rechazo a las maniobras antidemocráticas y solicitudes de la renuncia de importantes figuras del Ministerio Público.
Diferentes organizaciones condenaron el acoso al TSE, la persecución contra algunos de sus miembros y el hostigamiento que apuntan a irrespetar la voluntad popular.
