Buenos Aires, 14 ago (Sputnik).- El candidato de ultraderecha a la presidencia argentina y vencedor de las elecciones primarias celebradas el domingo, Javier Milei, afirmó que está en condiciones de ganar en primera vuelta a las otras dos fuerzas tradicionales, el peronismo gobernante, Unión por la Patria (centroizquierda), y la principal alianza de la oposición hasta ahora, Juntos por el Cambio (centroderecha).
«Si seguimos trabajando con esta pasión estamos en condiciones de ganarle a la casa en primera vuelta», señaló al celebrar los resultados desde su búnker en la ciudad de Buenos Aires.
Con 83 por ciento de los sufragios contabilizados que le otorgan una victoria de 30,8 por ciento, en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), Milei aseguró que ganó en 17 de los 24 distritos del país.
«Con estos números estaríamos en condiciones de tener ocho bancas de senadores (de 72) y más de 35 diputados (de 257)», sostuvo rodeado de sus colaboradores, que corearon «que se vayan todos», el grito que simbolizó el rechazo a los políticos que gobernaban en el estallido social de 2001.
El candidato a la presidencia por La Libertad Avanza destacó que la segunda candidata más votada en la provincia de Buenos Aires (este), donde vive el 37 por ciento del padrón electoral, fue su candidata a gobernadora, Carolina Píparo.
«Estamos frente al fin del modelo de la casta, ese modelo basado en esa atrocidad que dice donde nace una necesidad nace un derecho, pero se olvida que ese derecho alguien lo tiene que pagar», consideró Milei.
El candidato de ultraderecha, que se autodenomina liberal, aseguró que su agrupación es la fuerza más votada porque representa «la verdadera oposición» y los que quieren «un cambio único».
«Una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre», sentenció entre gritos y ovaciones.
En el país que está a punto de cumplir 40 años ininterrumpidos de democracia, Milei aseguró que «hace 40 años están todos en el Estado: los de buenos y los de malos modales».
Para el candidato presidencial de La Libertad Avanza, «el modelo de libertad termina con el robo de la casta política y con el robo de los políticos ladrones y los empresarios prebendarios».
«No solo somos el vehículo idóneo para terminar de sepultar el kirchnerismo, sino que somos los únicos en sacar al país adelante», ponderó.
En ese marco, Milei llamó aberración a la justicia social, y señaló que desde inicios del siglo XX, Argentina tuvo 22 crisis, de las cuales 20 tuvieron por origen el déficit fiscal.
«Eso se traduce en crisis de endeudamiento, en defaults (cese de pagos) y luego recurren a la emisión monetaria», opinó.
Con el grito de «viva la libertad, carajo» con el que inició y dio cierre a su discurso, Milei aseguró que su agrupación representa un «proyecto liberal con proyección nacional».
Resultados provisorios
El partido La Libertad Avanza, del economista libertario, cosechó casi 6,4 millones de votos, según el escrutinio provisorio del 87 por ciento de los votos.
En estos comicios votó el 69 por ciento del padrón nacional, el porcentaje más bajo de participación en unas PASO presidenciales, que fueron inauguradas en 2011.
La segunda fuerza más votada fue la principal coalición opositora, Juntos por el Cambio (centroderecha), mientras que en tercera posición quedó el peronismo gobernante, con su coalición electoral Unión por la Patria (centroizquierda)
La exministra de Seguridad durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019), Patricia Bullrich, se consagró como la candidata presidencial de Juntos por el Cambio al vencer en la interna al jefe de Gobierno de la capital, Horacio Rodríguez Larreta.
La fórmula de Bullrich consiguió 3,6 millones de votos y su contrincante quedó con 2,3 millones de respaldos, dentro de una fuerza que consiguió 28,1 por ciento de los votos a nivel nacional.
El ministro de Economía y precandidato presidencial del oficialismo, Sergio Massa, también fue electo como candidato a la primera jefatura del Estado por el oficialismo, que consiguió 26,8 por ciento de los sufragios emitidos en todo el territorio, equivalentes a 4,4 millones de votos.
El titular del Palacio de Hacienda, candidato de unidad del presidente, Alberto Fernández, y la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, logró 4,4 millones de los sufragios, mientras que su rival en la interna, el dirigente social Juan Grabois, aglutinó 1,2 millones de sufragios.
El Frente de Izquierda y de Trabajadores – Unidad (FIT-U) se resignó con 2,5 por ciento de los votos a nivel nacional, equivalentes a 552.000 apoyos.
Una excepción a la tendencia general de los resultados a nivel nacional fue la provincia de Buenos Aires (este), con casi el 37 por ciento del padrón electoral, donde el oficialismo fue la fuerza más votada con 32,2 por ciento de los votos, equivalente a 1,7 millones de electores, un millón de los cuales fueron a Massa, y los restantes 621.000, a Grabois.
La agrupación de Milei tampoco logró ser la fuerza más votada con sus candidatos a cargos locales.
En el distrito bonaerense, el actual gobernador, Axel Kicillof, obtuvo 36,4 por ciento de los sufragios, por delante de Juntos por el Cambio, que se resignó con 32,7 por ciento de los votos, mientras que la Libertad Avanza, con una sola precandidata, se conformó en el tercer lugar con 1,5 millones de votos.
En total 35,4 millones de personas, de un total de 46,2 millones de habitantes, fueron facultados para votar en estos comicios, en un país en el que el voto es obligatorio.
En estos comicios se presentaban 27 fórmulas presidenciales pertenecientes a 15 partidos y coaliciones, de los cuales siete celebran internas para definir al precandidato que lo representará de cara a las elecciones presidenciales del 22 de octubre.
Más de 1,1 millones de jóvenes, equivalentes al 3,3 por ciento del padrón electoral, pudieron votar por primera vez.
El escrutinio provisorio, adjudicado a la empresa española Indra, se llevó adelante a través de un operativo en el que también interviene la empresa de servicios postales de Correo Argentino, que desplegó 12.000 técnicos para digitalizar los telegramas de cada mesa y además facilitó las instalaciones y los servicios de conexión en todo el territorio.
El recuento definitivo de los sufragios, que es el que tiene validez legal, lo realizará la Justicia Nacional Electoral a las 72 horas de concluidos los comicios.
En caso de que en las elecciones presidenciales del 22 de octubre ninguna fórmula supere el 45 por ciento de los votos afirmativos (ni nulos ni en blanco) o al menos alcance el 40 por ciento de los sufragios válidos totales y mantenga una diferencia porcentual mayor a 10 puntos, se celebrará una segunda vuelta el 19 de noviembre. (Sputnik)
