Ciudad de México, 23 ago (Sputnik).- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador tildó de «retrógrado» al ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Luis María Aguilar, por suspender la distribución de los nuevos libros de texto gratuitos de la Secretaría de Educación Pública (SEP) en los estados de Chihuahua y Coahuila.
«Él tiene un pensamiento conservador, retrógrado, está en contra de nosotros, en contra de la transformación, pero no es un buen juez», dijo el mandatario mexicano en conferencia de prensa.
En esa línea, cuestionó las motivaciones que a su juicio tendría el togado para emitir la polémica resolución: «¿Para quién trabaja el ministro?, ¿le importa que los niños tengan libros, que tengan libros de texto?, ¿está pensando él de que si se quedan sin libros los niños sus padres no tienen para comprar libros?, ¿está pensando de que todos los libros son buenos, que los libros no se pueden prohibir, mucho menos destruir?, ¿ya leyó los libros o él cree que son libros para inyectar el comunismo?», se preguntó López Obrador.
El mandatario dijo que «aunque se molesten» seguirán denunciando este tipo de acciones y buscarán la forma de renovar el poder Judicial. Calificó a la Suprema Corte de ser un instrumento que impide «que haya Justicia» en el país.
Resolución agilizada
López Obrador recordó que este tema recibió un tratamiento bastante ágil en la SCJN. En el caso de Chihuahua, indicó que el gobierno de esa entidad presentó la controversia ante el organismo el 4 de agosto; cinco días después fue asignada a Aguilar y este, dos días más tarde, la admitió y concedió la suspensión, deteniendo la entrega de libros.
«¿Por qué no se le envió a otro ministro? […] Se le envía a Aguilar y dos días después lo resuelve Aguilar, paralizando la entrega de libros. Se llevó una semana, cinco días hábiles», expresó.
Asimismo, respecto a Coahuila, señaló que la controversia fue presentada ante la SCJN el 16 de agosto y ese mismo día fue registrada. Dos jornadas después, también le fue asignada a Aguilar, quien admitió y concede la suspensión en tiempo récord.
«¿Cuántos días se llevó? Tres días hábiles», dijo el mandatario, haciendo referencia a que entre el 18 y el 21 de agosto fue fin de semana y, por tanto, no eran días laborales para el sistema judicial.
López Obrador comentó que el procurador fiscal de la Federación, Félix Arturo Medina, denunció el martes que, en contraposición, Aguilar tiene desde hace ocho meses en sus manos un expediente sobre «una empresa que le debe a la Hacienda Pública» alrededor de 25.000 millones de pesos (poco más de 1.487 millones de dólares) desde hace 13 años.
«Lleva ocho meses guardado el expediente en la gaveta del escritorio del ministro Luis María Aguilar Morales», denunció el mandatario.
«Desinformados»
La polémica por estos libros surgió porque la oposición partidaria y mediática acusó al Gobierno de querer «ideologizar» a los menores con supuestas premisas «comunistas» que atentan contra la familia.
Además de acudir a la Justicia, en algunas partes del país los libros fueron quemados, y padres y madres han marchado para rechazar el material de estudio.
Al respecto, el martes, López Obrador consideró que los padres y madres que rechazan o han quemado los libros son víctimas de la desinformación.
«Están en su derecho de manifestarse, nada más qué no tienen razón. Se manifiestan pensando de que se adoctrina con los libros y se inyecta ‘el virus del comunismo’. Pues están totalmente desinformados y manipulados y no deberían de prestarse», afirmó. (Sputnik)
