San Juan, 6 sep (Prensa Latina) La ministra de Educación de Puerto Rico, Yanira Raíces, confirmó hoy que avanzan las gestiones para la compra de abanicos con el fin de afrontar la ola de calor en las escuelas públicas.
La funcionaria, que trata de este modo de atender el malestar de docentes y alumnos ante las altas temperaturas que afectan a esta isla del Caribe de 3,2 millones de habitantes, se ha reunido con dirigentes sindicales para atender el grave problema, debido a las temperaturas de hasta 98 grados Fahrenheit.
Este próximo viernes las escuelas públicas del país no operarán con el propósito de dar un respiro al personal docente y a los estudiantes, mientras se analizan opciones futuras.
Uno de los problemas que tienen las escuelas es que, además de no tener ventiladores, el diseño de las estructuras no está concebido para una zona del Caribe, ya que carecen de ventilación cruzada.
Por eso, Raíces anunció una serie de medidas en respuesta a la creciente ola de calor derivada del calentamiento global que está afectando a las escuelas públicas y comunidades en general.
“Estas medidas son esenciales para salvaguardar la salud y el bienestar de la comunidad educativa, por lo que la colaboración de los padres, el personal escolar y las autoridades locales será crucial para mitigar los efectos de la ola de calor”, dijo.
Además, apuntó, estamos trabajando en la adquisición de equipos como abanicos y acondicionadores de aire, siendo conscientes de las limitaciones eléctricas en las escuelas.
Raíces Vega destacó que es importante que los estudiantes y los demás miembros de las comunidades escolares colaboren con la implementación de este plan para beneficio de todos.
Entre las medidas a establecerse están centros de hidratación equipados con agua fría en puntos estratégicos dentro de cada escuela.
Igualmente, se hará un análisis detallado en cada escuela para determinar las necesidades de equipos y la capacidad eléctrica disponible.
Se buscarán soluciones, como la instalación de subestaciones eléctricas en casos necesarios, para garantizar una infraestructura adecuada.
Aparte, se considerará una posible modificación en los horarios de clases para impartirlos en momentos de menor intensidad térmica.
Irónicamente, las más de seis mil fuentes de agua instaladas en las escuelas debido a la pandemia de Covid-19 no han recibido reemplazo de filtros, con lo que se procederá ahora para asegurar su óptimo funcionamiento en las instituciones educativas.
Hay quienes han planteado que la compra precipitada de ventiladores y acondicionadores de aire será un caldo de cultivo para la rampante corrupción que azota a Puerto Rico.
