Quito, 7 sep (Prensa Latina) De enero a agosto de este año 12 mil 959 ecuatorianos fueron deportados de Estados Unidos, según estadísticas de la Subsecretaría de Migración del Ministerio de Gobierno divulgadas hoy en esta nación sudamericana.
La cifra -publicada por el canal Ecuavisa- indica que esa cantidad es superior a los mil 326 migrantes devueltos por Washington en 2022.
Los deportados arriban al territorio ecuatoriano en vuelos semanales que llegan al aeropuerto internacional de Guayaquil.
El Departamento de Seguridad Nacional estadounidense calcula que el costo de detención, alojamiento y deportación por cada indocumentado supera los 11 mil dólares y algunos permanecen hasta cuatro meses detenidas antes de su regreso.
Si bien por salir de forma irregular no reciben ninguna sanción, aquellos con órdenes de detención por delitos en Ecuador sí resultan detenidos, y en ese caso se encuentran este año 165 de los retornados.
Ecuador vive una ola migratoria de sus ciudadanos debido a la falta de oportunidades en el mercado laboral formal y, sobre todo, al aumento de la inseguridad.
Este país suramericano cerró 2022 con más de 25 muertes violentas por cada 100 mil habitantes, y el 2023 culminará mucho peor, pues en lo que va de año las autoridades reportan cuatro mil 835 homicidios.
A su vez, la prensa nacional ecuatoriana divulgó este jueves declaraciones del alcalde neoyorquino, Erick Adams, quien se refirió al alto número de ecuatorianos en esa urbe estadounidense y cómo ellos, junto a los migrantes de otras naciones, pueden causar afectaciones en los servicios.
